Esta es la fórmula posta para los guionistas ronin, los que no tienen el kiosquito armado en la Fierro, ni entregan el marrón para publicar unitariios de 12 páginas en los contenittores italianos, ni se dejan la vida presentando proyectos de álbum a las editoriales francesas: siete u ocho guiones cortos, un tema que más o menos los englobe a todos, repartir los guiones entre varios dibujantes amigos que quieran laburar de onda (en los posible, que dos o tres de esos 7 u 8 sean conocidos, o tengan un grupúsculo de fans considerable) y cuando todo el mundo entrega, romper el chanchito para editar una antología o yirar con el libro terminado por los sellos editores chicos y medianos que suelen apostar por los autores incipientes de la historieta argentina.
Damián Connelly (vimos una novela suya en Enero de 2012) lo entendió perfectamente y se embarcó en este proyecto que engloba siete historias autoconclusivas, con la excusa de que todas transcurren en la misma ciudad. La verdad, no se nota. No sólo porque los personajes no se cruzan nunca, sino porque los dibujantes aportan planteos gráficos tan disímiles, que no hay una cohesión, no decís “ah, están en Winchester”, a menos que un cartel nos lo indique. Pero vamos a las historias, que son lo importante.
Arrancamos con una breve historia en prosa, acompañada por una ilustración de Berliac. Obviamente seguí de largo, porque yo quería leer historietas, no prosa. Así caí en la primera historieta, la más extensa (27 páginas), en la que descubrí, por un lado, un guión atrapante, fuerte, sin cabos sueltos, un verdadero mecanismo de relojería. Y por otro lado, al dibujante brasilero Odyr Bernardi, un bicho rarísimo, con una técnica pictórica medio brecciana, muy jugada a los climas y sin tropiezos en la narrativa. Si en alguna viñeta algo no está clarísimo, se debe a que el trabajo de Odyr parece realizado a todo color y luego “traducido” a blanco, negro y grises. Me imagino esto a color y me vuelvo loco, flasheo un comic dibujado por Munch o Van Gogh...
La siguiente historia es más breve (8 páginas) y más confusa. No se sabe muy bien a dónde va Connelly, y los enfoques que elige Loris Z tampoco ayudan demasiado. Sospecho que si tenés muy escuchado el álbum Pet Sounds de los Beach Boys, esto debe tener más sentido, pero a mí que lo escuché poco (y hace mucho) me dejó bastante en bolas.
Vamos con otra historia larga (21 páginas), para la que Connelly recluta a Renzo Podestá, el dibujante de 27, y este responde con una fiesta del claroscuro. Un laburo realmente brillante de Podestá, con momentos muy Sin City, y con algunas secuencias perfectas (la que inicia la página 7, por ejemplo), de esas que sólo se le pueden ocurrir a un narrador consumado. El guión nos sumerge en una obsesión bizarra y perversa, aunque desaprovecha un toquecito el tema de que lo que sucede tiene que ver con la filmación de una película porno. Connelly apuesta mucho a las viñetas mudas, lo cual potencia el laburo de Renzo y a la vez tiñe de amibigüedad algunas escenas (sobre todo la del final), que podrían ser más claras, o más redondas, con la ayuda de los textos.
Amelia, con dibujos de Diego Simone, es una muy breve historieta de 4 páginas. No da para desmenuzarla, pero sí para destacar la calidad de los dibujos. Otra muy cortita es la que cierra el tomo, tres paginitas dibujadas por Loris Z, esta vez con menos masas negras y más claridad, un poquito más cerca de Jeff Lemire. El guión, como casi todos los guiones de tres páginas, apenas esboza una idea.
Y vuelvo para atrás para encontarme con Muerta al Amanecer, una historieta con 22 páginas y un guión sencillamente brillante. No quiero contar nada, porque quiero que lo leas. Está dibujado por un Matías San Juan inspiradísimo, en un estilo donde se encuentran Pier Brito (maestro de Matías), Juan Bobillo, Paul Pope y el Lucas Varela más realista, el de Sasha Despierta. La narrativa es perfecta, los fondos son alucinantes, los personajes son 100% creíbles y –como en la historieta de Odyr- parece un trabajo realizado a color y traspasado a grises, lo cual lo desluce un toquecito, no mucho. De nuevo, me imagino estas páginas a color y me caigo de orto, reboto y me vuelvo a caer unas 53672 veces. Un detallito menor: en un momento, Adrian dice “¡Nada, ni una puta cosa va a pasarte!”. Frase desafortunada, que parece una mala traducción del inglés y que, leída en Argentina, no suena ni linda ni verosímil. El resto, una maravilla.
Si no te hiciste fan de Damián Connelly cuando editó Devil Got My Woman, ahora tenés una nueva oportunidad de descubrirlo. Es un guionista raro, con un gran manejo del misterio, de los climas sobrenaturales, de esas cosas extrañas que aparecen en las historias al principio como algo menor y al final como algo intoxicante. Y en esta antología despliega todo lo que sabe hacer, de la mano de algunos dibujantes muy, muy grossos. La recomiendo a full.
Justo lo lei hoy, me parecio muy flojo, lo más salvable son Ed Carter y Muerta al amanecer (que algunas viñetas aparte de los que mencionas me hicieron acordar a Negro de Baru), que son las más extensas, oh casualidad las mejor dibujadas y las que realmente te cuentan una historia, el resto no me gusto nada, y el dibujo de Loris Z me parecio horrible, no vuelvo a tocar otro libro donde aparezca ni con una lanza.
ResponderEliminarNacho.
Guionista Ronin es creo es una de las mejores maneras de definir a Connelly. Ed Carter y Muerta al amanecer son dos historias muy buenas y extremos opuestos estéticos (la segunda obviamente es mucho más mainstream friendly, lo que cuadra bastante bien con la historia). El hallazgo del libro sin dudas es Odyr. El trabajo de Loris Z aunque despojado, no me parece horrible, tiene su encanto, hay cosas muy interesantes en como juega con las formas en Would'nt be nice. Del laburo de Renzo Podestá y Diego Simone no queda más que decir que lo que ya dijiste. A mi me pareció un libro bastante redondo.
ResponderEliminarme gustó mucho el libro, que los relatos sean autoconclusivos, personalmente las historias que mas me gustaron fueron la de renzo podesta, odir y matías san juan en ese orden (relato y dibujo). Del resto de los dibujantes no desmerezco a ninguno, creo que cada cual aportó un condimento a la antología, los dibujos de loris z tampoco me parecen horribles como pusieron más arriba,me gustó la diverisidad de los dibujantes y el punto en común en las historias. También rescato que es un proyecto independiente y original; fuera de lo que nos venía acostumbrados la historieta argentina.
ResponderEliminarHola Andrés, muchas gracias por la reseña (Creo que no apareció mi comentario anterior, así que vuelvo a escribirlo)
ResponderEliminarSobre la historia de Odyr. Originalmente fue hecha en azules, pero por problemas obvios de edición tuvimos que pasarla a grises, es una lastima por la versión en azules era mucho superior. En cambio Muerta al amanecer fue hecha completamente en grises.
A pesar de muchos contratiempos que a cierto punto llegaron a convertir a este libro en "un libro maldito", quede muy contento con él y con trabajar con todos los dibujantes. Una deuda pendiente para los próximos libros sobre Winchester es lograr esa unión que te lleve a decir "Esto es Winchester", sólo es cuestión de tiempo.
Respecto al primer comentario del anónimo. Yo creo que si no te gusta un autor con que digas que simplemente no te gusta ya podemos entender el punto, todo lo demás no es necesario.
Saludos.
Damián Connelly
En base a los comentarios anteriores volvi a hojear el libro, y no, me sigue pareciendo impresentable lo de Loris, miro la página 90 y no encuentro encanto por ningún lado, pero bue, son gustos...comparto a full la opinión sobre Odyr, estuve mirando su blog y tiene cosas muy grossas..
ResponderEliminarNacho.
Me parece perfecto, Nacho. Pero hay formas y formas de expresar lo que te parece el trabajo de un dibujante.
ResponderEliminarGracias por leer el libro.
Saludos.
Damián.
Damián:
ResponderEliminarNo insulte ni hice descalificación personal a nadie, y me parece que, siempre dentro de ese marco de respeto,cada uno puede decir lo que quiera, sería muy aburrido este blog y los comentarios de los seguidores si fueran todos "me gusta" o "no me gusta", de hecho es todo lo contrario.
Hay que tener un poco más de cintura y bancarse las opiniones adversas.
Sds,
Nacho.
Fijate que hace un par de reseñas, Andrés elogio el guión y la narrativa de "El Bondi", pero lo mató en cuanto al dibujo, fijate la respuesta de Chelo Candia, a eso me refiero con cintura...
ResponderEliminarNacho.
Muy bien. En mi opinión no me pareció así, no logre ver ese marco de respeto que mencionas.
ResponderEliminarNo tengo ningún problema con las opiniones adversas, todo lo contrario. Algunas son constructivas y te sirven para mejorar tu trabajo, este no creo que sea el caso.
Saludos
Damián.
Damián:
ResponderEliminarEs cuando menos curioso que lo mio te parezca falta de respeto y un comentario del mismo tenor dentro de una reseña anterior de un libro tuyo no: "Una vez que tirás a la basura esa sobrecubierta espantosa que lo envuelve", es muy particular como trazas la linea de lo que es "critica constructiva" y lo que no.
Saludos,
Ignacio.
ResponderEliminarLas formas a veces son cuestiones subjetivas che, no da para extenderlo mucho más. Por otra parte, por ejemplo la sobrecubierta a mi me pareció buenísima (estéticamente), lástima que es un choreo a ¨Everything is illuminated¨ de Safran Foer, pero me gustó, saludos
Jeremias
que gracioso, alguien que dice que el dibujo de tal autor es horrible y dice que una sobrecubierta es espantosa después quiere aminorar la agresión y habla de respeto cuando no se refleja en sus palabras, cuanta contradicción, nacho buscate una vida; te escribe alguien que sigue desde cerca a los autores y admira su trabajo. Yo si critico a alguien lo hago con fundamento.
ResponderEliminarMi nombre es Diego, a veces leo este blog, a mí me copan más los superhéroes pero banco a la historieta en general. Y resulta que de pedo me compré este libro en el CBB del año pasado.
ResponderEliminarA mí me gustó un poco menos que a Acorssi pero voy a releerlo otra vez para mirarlo con otros ojos y ver cosas que evidentemente se me pasaron por alto la primera vez.
No me gusta que un creador, en este caso Damián, se ponga a discutir con un lector por el tono de un comentario, cosa totalmente subjetiva. No me gusta, me parece innecesario y preferiría que se la banque... Es tan obvio que cuando uno hace algo a algunas personas les guste y a otras no... Pero andar cuestionando tonos, si hubo o no faltas de respeto, me la baja un poco, sobretodo pensando si la próxima vez que vea algo de D. Conelly voy a comprarlo o no. Les dejo mi aporte hecho con la mejor onda. Saludo a todos,
Diego
hola a todos. estoy buscando "Persona", de Loris Z, pero en todos lados me dicen que está agotado, alguien sabe si lo van a reeditar?
ResponderEliminarsaludos
Es posta. Está agotado. Consultá con la editorial La Pinta, que fue la que lo editó.
ResponderEliminarBueno, a ver:
ResponderEliminarSobre la sobrecubierta de DGMW:
Cuando salió la reseña de Andrés la verdad que ya había escuchado muchos comentarios sobre dicha sobrecubierta y no quería volver a hablar de lo mismo y además, tampoco tenía el tiempo para hacerlo. Pero al fin y al cabo, era sólo una sobrecubierta y no un autor y amigo que respecto mucho cómo Loris Z.
Diego: Entiendo tu punto de vista, pero... Si hablan sobre mí o mi trabajo, me la banco y mucho, nunca tuve ningún problema con eso, y cómo dije antes, algunas criticas son muy buenas para mejorar. Si hablan con criterio de las cosas, tampoco me voy a meter a discutir, pero cuando se habla con un tono agresivo y despectivamente sobre alguien que trabajo conmigo, ahí si me meto.
Es una pena que midas si vas a comprar o no alguno de mis próximos libros por que tenga una discusión con alguien, pero bueno, si así te parece, está más que bien.
Por lo pronto no tengo mucho más que agregar.
Andrés te pido disculpas si genere una discusión en tu blog pero yo soy de esas personas que creen que callarse(cuando sabe que algo no esta bien) es lo mismo que no tener sangre en las venas.
Saludos.
Damián Connelly.
En este blog los debates son sumamente bienvenidos, Damián, sobre todo cuando se debate con altura y sin insultar. Este es un espacio de libertad absoluta, tanto para mí, como para quienes entrar a leer y comentar lo que yo escribo.
ResponderEliminareso no es cintura es justificar por que los dibujos de tu libro son una cagada. "es porque los hice rapido" ahi estas admitiendo que son una cagada conparados con tu estilo normal. si sabes que no son lo mejor que podes dar de vos para que los publicas?ofrecerle eso al lector es decirle que esa chotada es lo que se merece. es mi opinion pero bueno
ResponderEliminarAl Anónimo sin huevos, quedate tranquilo que si tengo una vida,y si tuvieras dos dedos de frente te hubieras dado cuenta que lo que puse de la sobrecubierta es de una reseña de Andrés para ejemplificar la incoherencia de la respuesta que me dieron.
ResponderEliminarO sea, bardear a Rob Liefeld está perfecto pero cuando te metes con un autor de aca sos "agresivo y despectivo".
Sds,
Nacho.