Tarde o temprano tenía que suceder: algún editor se tenía que poner las pilas y reeditar en libro los alucinantes trabajos de Ariel López V., este eximio historietista y humorista gráfico, volcado también a la animación, que es lo que le da de comer. Llanto de Mudo apostó por Inhumano y le puso todo lo que hacía falta para que fuera uno de los libros fundamentales que nos dejó 2012: 64 páginas, 32 de ellas a color (una novedad en el historial del sello cordobés), un gran prólogo de Gustavo Sala y sobre todo, espacio para que se luzca el talento inhumano de López V.
Acá hay chistes de una sóla viñeta, tiras, historietas de varias páginas, ilustraciones, y esas páginas raras que arma Ariel en las que mezcla distintas cosas, con textos en joda, parodias de publicidades y demás. En una de esas páginas “vale-todo” encontré lo que más me hizo reir de todo el libro que es esa columnita llamada “Diccionario para Ricos presenta el Ping-Pon”.
En sus chistes, López V. trabaja el humor en distintos registros: el delirio y la bizarreada con cierto aire gustavosalesco, la guarangada de pija y concha, las referencias geeks, los juegos de palabras medio pavotes (pero muy ingeniosos) y el comentario mordaz sobre temas socio-políticos. En las historietas también aparece todo eso, sumado a otro elemento muy presente, por lo menos en las que aparecen en Inhumano: la comedia costumbrista protagonizada por “jóvenes a la deriva”. Ahí el autor hace gala de un gran poder de observación para retratar a los chicos de los suburbios y su particular forma de vestirse, moverse y hablar. En esos pasajes del libro también encontré (o redescubrí) material de gran nivel, repleto de encanto, comicidad y fina mala leche.
De todos modos, lo más impactante del libro (y de la obra de Ariel, en general) es la inverosímil calidad del dibujo. Acá estamos ante un dibujante definitivo, un tipo que –con la desmesura de los grandes- se propone reinterpretar el universo entero, no dibujar NADA de formas que ya hayan sido dibujadas antes. López V. es estilización pura, es sorpresa constante y reconocimiento inmediato de un grafismo que no puede haber salido de ningún otro lado más que la mano (y la mente) de este demente hincha de Nueva Chicago. Y aún así, López V. nos remite a un montón de dibujantes conocidos (por mí, no sé si por él): autores del indie yanki, de las revistas humorísticas españolas, de fanzines y proyectos chiquitos de Argentina y demás países latinoamericanos... Es casi imposible ser fan de la estética underground, o alternativa, y no cebarse con los dibujos de López V. Las páginas a color nos permiten apreciar el excelente criterio con el que el autor echa mano a ese recurso, y en las páginas a blanco y negro se publica o bien material pensado para blanco y negro, o bien material pensado para color pero que no sufre el pasaje a blanco y negro y grises, que no se convierte en un empaste sin onda y sin equilibrio.
Esto es todo ganancia, recomendable al mango, de punta a punta. Sobre todo para el que no conoce este material (publicado a veces en la web, otras en Comiqueando, Lule le Lele o Barcelona), porque va a descubrir a un autor absolutamente genial, con un estilo único e hipnótico. Lástima que Ariel está muy ocupado con su laburo en el campo de la animación. Si no, creo que seríamos muchos los que le compraríamos un libro como este todos los años.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
7 comentarios:
interesante. probablemente lo termine comprando. que bien por llanto de mudo que sigue arriesgando.
has leido "EL LIBRO GORDO Y RETARDADO DE LA BABA" (de llanto tmb)? q onda?
Me cebaste con la reseña, mañana mismo lo compro!
Matias.
No, Gunny, todavía no leí La Baba...
Lo tengo, está muy bueno
Que buena pinta que tiene! Cuánto está?
Lo conseguís a $ 55 en las mejores comiquerías.
Lea el de la baba accorsi q esperamos la critica sagaz de la mierda que editamos.besitos
Publicar un comentario