el blog de reseñas de Andrés Accorsi

viernes, 28 de diciembre de 2012

28/ 12: TOM STRONG Vol.4

Me reencuentro con Tom Strong (una serie de la que nunca llegué a hacerme hardcore fan) porque encontré muy barato este TPB con los números 20 al 25 de la serie creada por Alan Moore y Chris Sprouse.
Vamos de atrás para adelante, y así es como arrancamos con un numerito muy menor, apenas una anécdota graciosa, escrita por Geoff Johns y muy bien dibujada por el gran John Paul Leon. Después aparecen dos unitarios más, ambos escritos por Peter Hogan y dibujados por Sprouse, aunque no con todas las pilas. Uno de los guiones de Hogan, el de las mujeres murciélago de la Luna, es bastante flojo y sólo se redime porque le da a Sprouse la oportunidad de homenajear a Hergé con una ilustración que recrea la genial portada de Aterrizaje en la Luna. El resto, es sin dudas prescindible. El otro unitario, el de Greta Gabriel y el Dr. Permafrost, es realmente grosso, con una trama fuerte, redondísima, con grandes escenas y grandes diálogos y un final totalmente impredecible. Está tan bueno que se podría cambiar a Permafrost por Mr. Freeze y meterlo entre los comics basados en la serie animada de Batman, esos que escribía Kelley Puckett en los ´90, en los que cada vez que aparecía Mr. Freeze se prendían fuego las páginas (valga la paradoja).
Y claro, la papa más fina está en la trilogía con la que abre el tomo, escrita por el mismísimo Mago de Northampton, quien luego de esta saguita abandonaría la serie para regresar sólo en el capítulo final (el 36). Entre tanto Elseworlds y What If...? medio pelo, acá Moore se embarca en una historia alternativa de ese estilo, pero con un nivel impresionante. Una mínima variante en una secuencia del origen de Tom Strong da pie a una nueva línea temporal en la que el héroe nunca nace, y su lugar lo ocupa Tom Stone, hijo de la mamá de Tom Strong y un marinero negro. La vida de Tom Stone tendrá puntos de contacto y puntos de absoluto disenso con la del Tom Strong que todos conocemos y de ahí Moore sacará un jugo virtualmente inagotable para mostrar nuevas e impredecibles aristas de los personajes y el mundo que los lectores ya teníamos asimilados.
Además, fiel a su estilo, el Mago explorará esta bizarra vuelta de tuerca hasta sus últimas consecuencias: ¿quién causó esta variación en el pasado de los personajes? ¿Por qué? ¿Quién sabe que esa realidad no es la “verdadera realidad”, sino que es una versión alterada de otra realidad “oficial”? ¿Qué se hace para anular una línea temporal alternativa cuando uno sabe que sólo puede conducir a la catástrofe? Todos esos elementos tan gancheros y adictivos que vimos mil veces en sagas como Back to the Future o la Legion de Keith Giffen, en manos de Alan Moore cobran un vuelo realmente impactante, electrizante. Y no puede faltar la secuencia en la que el Mago hace jueguito para la tribuna y pela algún truco narrativo de esos que te quitan el aliento: en este caso, las dos páginas previas a la última, en la que nos narra en paralelo dos secuencias que transcurren en distinto lugar y en distinto tiempo, alternándolas de a una viñeta cada una, todas widescreen y todas importantísimas para la definición de una saga brillante.
Como todo truquito de narrativa, para que salga bien hace falta la complicidad de un dibujante de bueno para arriba, y acá el Mago contó nada menos que con Jerry Ordway, quien se puso al hombro toda la trilogía de Tom Stone con la solvencia y la elegancia que lo caracterizan. Algún día alguien me explicará por qué un dibujante con la calidad de Ordway no tiene muchísimos más fans, ni una legión de editores a sus pies, suplicándole que trabaje para ellos. Lo cierto es que acá el ídolo no sólo recrea con mínimas modificaciones las escenas del origen de Tom Strong que ya nos habia contado Sprouse en los primeros episodios, sino que además reversiona a decenas de héroes y villanos (en la saga interviene prácticamente todo el universo ABC) y crea a otros tantos, para luego entrelazarlos en secuencias sumamente ambiciosas y jodidas de dibujar. Y bueno, maestro, vos sabés que cuando agarrás un guión de Moore, te vas a tener que esforzar el doble. Felizmente, tanto Ordway como Sprouse y Leon están apuntalados por el trabajo siempre magistral de Dave Stewart, as indiscutido del color digital. Lo de Stewart es muy importante, sobre todo para realzar la labor de Sprouse, cuyos unitarios están dibujados muy con lo justo, bastante por debajo del nivel habitual de este animalito.
Y bueno, de acá en más queda un sólo episodio de Tom Strong escrito por el Mago, así que me bajo en esta, nomás. Tendremos más Alan Moore acá en el blog durante 2013. Prometido.

7 comentarios:

Julio dijo...

Andrés, hace un tiempo anunciaste que había planes para editar las sagas de Dago dibujadas por Carlos Gómez en Argentina.

La revista Comic.Ar hizo ese anuncio, pero fue ayer 28 de Diciembre. Es en serio o es otra inocentada?

Andres Accorsi dijo...

No, es posta. Ya está la noticia en la página de Comiqueando, también.

Julio dijo...

Vamos carajo, alegría para todos!

Retomo algo que dijiste en el post, por qué no gusta Ordway? Yo supongo que su estilo es muy clásico, y una de las obras a las que el coleccionista argento tuvo acceso en masa, Adventures of Superman con Marvin Wolfman perdía en la comparación con un John Byrne "en fuego".

Andres Accorsi dijo...

¿Será por eso? Acá también se publicó su adaptación de la primera peli de Batman (creo que con guión de Denny O´Neil), que tenía unos dibujos excelentes...
No sé... En EEUU tampoco le dan la bola que se merece, pobre Ordway. Yo justo ahora estoy leyendo otra historieta suya, para reseñar mañana o pasado.

Anónimo dijo...

No creo que sea por la comparación con Byrne. A mis los dibujos de Ordway en superman me parecian geniales, es mas me gustaban mas que los de Byrne. Su estilo es clasico y es por eso que esta tan bueno eldibujo. Ordway la viene rompiendo desde el All-star squadron que para mi es donde mejor dibuja con el broli de power of shazam. Encima el dibujo del tipo esta intacto, un genio ordway

Reznor dijo...

La verdad que lo de Alan I en Tom Strong es bastante pobre. Me gustaron algunos numeros, y sobretodo el ultimo que engancha con Prometea. Pero ya se notan las limitaciones del ingles. Una pena.

D.L. dijo...

no es por eso, y lo digo porque me pega generacionalmente. la prueba es que en cualquier kiosko se podía encontrar algún taco con los números posteriores a "la saga del exilio espacial" donde ordway vuelve a dibujar y el nivel que pela es realmente espectacular. saludos de año nuevo.