viernes, 23 de abril de 2010
23/ 04: LOS REYES ELFOS: HASTA LOS DIOSES MUEREN
Fuera de los tomos de historias cortas (que ya pasaron por acá dejando una estela de cebamiento infinito difícil de apaciguar) la epopeya de Víctor Santos se compone de cuatro libros “posta”, o en realidad, cuatro recopilatorios de lo que originalmente fueron sendas miniseries. Y yo, que como buen pelotudo los voy leyendo en el orden en que los consigo, acabo de llegar al final sin haber leído jamás el principio. Por suerte Santos es muy claro a la hora de explicar qué corno está sucediendo, y además las historias cortas (al interesectar en momentos muy distintos de la saga) me aportaron un background bastante razonable como para ubicar a los personajes, saber de qué juega cada uno y demás data básica como para disfrutar este tomo sin haber leído los anteriores.
Esta es la etapa crepuscular de la epopeya: los elfos llevan varios años en guerra contra los humanos y el Ragnarok devastó a Asgard, con lo cual los dioses nórdicos ya no pueden proteger a su raza favorita. Hace tiempo que el sol no se deja ver en la Tierra, azotada cruelmente por tormentas y nevadas y regada con la sangre de ejércitos enteros. Los humanos tienen un nuevo líder, Consejo de Lobo, un hábil estratega que moviliza a los cristianos en una cruzada religiosa contra los elfos. Ehren Heldentodsson, el rey elfo, el protagonista de toda la saga, lidera a los suyos en la improbable resistencia en la ciudadela fortificada de Nastrond mientras su poder mágico se desvanece y su amada Deidre agoniza. Anna (hija de Ehren) y Jurgen Ulf (viejo aliado y a veces rival de Ehren) son los testigos del ocaso final de los dioses asgardianos. El Caballero Oscuro, eterno enemigo del rey elfo, logra volver a manifestarse en esta dimensión. Todo va hacia un final, profetizado hace siglos, y cuando llega ese desenlace, no defrauda en lo más mínimo.
Hasta los Dioses Mueren es una auténtica cátedra de cómo se cierra una saga de fantasía épica. Están Odín y sus cuervos, Thor, Fenris, Yggdrassil, Vali, las Furias (o las Benévolas, o las Nornas, o las tres damas que se llevan al Rey Arturo a Avalon), aparece el propio Arturo (!), hay un ángel (o alguien que parece un ángel), espadas legendarias de inconmensurable poder, guerreros nobles dispuestos al sacrificio final, viejos amigos enfrentados (algo muy presente en la obra de Santos), eternos enemigos dispuestos a librar el combate final, y un legado de sangre que abrirá la historia hacia un futuro lejano (el Siglo XX), donde tiene lugar el epílogo (y una de las mejores historias cortas de las que ya leímos en otro tomo).
Los hallazgos de Santos son muchos, pero tal vez el más notable sea cómo se resiste a plantear la guerra como un conflicto entre buenos y malos. Ehren Heldentodsson es, sin dudas, el protagonista. Pero quienes lo enfrentan no están retratados como villanos, sino como guerreros a los que el destino o la fe llevaron a entrar en conflicto con el rey elfo. La revelación de la identidad del Caballero Oscuro es totalmente inesperada, al igual que el final de Ehren a manos de… no, no lo puedo spoilear.
En cuanto al dibujo, acá vemos al Víctor Santos más evolucionado, el que ya descubrió a Darwyn Cooke y lo supo combinar con Bruce Timm, Matt Wagner, Frank Miller y Mike Mignola; el Santos que sacó chapa de mago de los claroscuros, de las tramas mecánicas, de los climas sombríos, de la acción vertiginosa, del trazo potente, dinámico, desbordante de expresión; el Santos que se juega a experimentar con la cancha de los grossos. Visualmente, este tomo final es el mejor de la saga, lejos. Había que estar muy afilado para plasmar en el papel tanta emoción y tanto power y Santos, una vez más, superó ampliamente el desafío. Gloria eterna para Ehren Heldentodsson y Los Reyes Elfos.
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3 comentarios:
No sé qué opinas, pero creo que si prestamos atención a la edad de Santos y al trazo o la forma en que distrubuye los negros... para mí que otra gran influencia deben ser los libritos esos de Boblioteca Excelsior que sacaba Forum (y después creo que Panini) con las historietas Marvel de Kirby sin colores. Ahí encuuentro mucho de los grises planteados en base a muchos detalles juntos, la línea de pincel y hasta la cantidad de cuadritos por página.
Qué tal la idea?
Y sí, Victor Santos es una bestia total alucinante!!!
Leíste "Hire, el Vampiro Samurai"? Tiene algo en común con ésta saga de Santos, ése estilo muy "under" para contar historias que, en definitiva, pertenecen más al mainstream que al terreno de lo independiente. Algo asó como lo que hicieron Eastman y Laird con T.M.N.T., no?
No, nunca leí Hire, el Vampiro Samurai... ¿Está bueno?
Y sí, puede ser que ese aluvión de comics de Marvel publicados en blanco y negro haya influenciado a los jóvenes autores españoles... Aunque narrativamente, Santos no se parece ni a Kirby, ni a Ditko, ni a Colan, ni a Buscema, ni a ninguno de los autores clásicos de Marvel...
Hola Andrés:
Un colega mío me ha mandado un enlace a tu blog, que no conocía.
¡Muchas gracias por esas reseñas donde quedo tan bien y por los esfuerzos que haces para hacerte con los libros!
Ya siento que cueste tanto de encontrar mis comics en castellano, la verdad es que debería ser más fácil que pudiesen cruzar el charca a Argentina u otros paises con nuestro mismo idioma. En eso las editoriales españolas no ahcen el esfuerzo que deberían
Saludos
Victor
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