el blog de reseñas de Andrés Accorsi

miércoles, 7 de julio de 2010

07/ 07: FLY BLUES


Esta es otra historieta que conocí gracias a Fierro, pero que no pude leer en dicha revista por esa manía pelotuda de publicar las novelas gráficas en fetas, cortadas por cualquier lado. Eso se puede hacer si son series con estructura episódica, no con las novelas gráficas y me causa una profunda desazón que nadie en Fierro sepa diferenciar una cosa de la otra. Lo cierto es que en la Feria del Libro vi Fly Blues en libro, magníficamente editado por el sello francés Futurópolis, y aunque el precio no era bolsillo-friendly ni mucho menos, lo que había visto en Fierro me había cebado lo suficiente como para pelar la VISA sin chistar.
Antes que nada… ¿esto es historieta argentina? El guionista vive en España hace 35 años. El dibujante en Inglaterra, también desde los ´70. Los dos nacieron acá nomás, pero, ¿podemos decir que lo que hacen es historieta argentina? Está abierto el debate para los que quieran dejar sus comentarios.
Lo que me parece que está fuera de discusión es que Carlos Sampayo y Oscar Zárate son dos artistas de un talento enorme. Y encima llegaron al pico de su oficio hace ya muchos años y nunca bajaron, con lo cual han acumulado una cantidad de obras grossas (ya sea juntos o separados; Sampayo con otros dibujantes, principalmente José Muñoz; y Zárate con otros guionistas, entre ellos Alan Moore) que realmente te pone los pelos de punta.
Esta vez todo gira en torno a la música, que es algo MUY difícil de hacer en historieta, porque la historieta no tiene sonido. Hay una metáfora visual para la música, que es la partitura, pero la gran mayoría de los lectores no la sabemos leer. O sea que hay que imaginársela, no queda otra. Fly Blues cuenta la historia del encuentro frustrado entre dos trompetistas de jazz: el ascendente Patrick Reggiani y el consagrado Kenny Meadows (un homenaje a Kenny Dorham). Los planes de grabar juntos se truncan cuando Meadows es cruelmente asesinado, y una testigo del crimen, Debra, será quien tenga que llevarle a Reggiani la noticia (y la trompeta).
Debra, la realizadora de dibujos animados, es lo más parecido a una protagonista que tiene la novela, en la que el juego es claramente coral, con muchos personajes importantes cuyas vidas se interesectan. El leitmotiv, el yeite que utilizan los autores para hilvanar las historias y las secuencias, y hasta para contarnos más cosas de los personajes son las moscas. De veras. Jazz y moscas.
Y violencia, mucha más que en los otros comics de Sampayo. Tanta que choca, contrasta con la trama romántica de Debra y la artística de Patrick y sus músicos. Buena parte del protagonismo recae en los asesinos de Meadows, una pandilla zarpada y pervertida que acechará a Debra hasta el final. Y Meadows, que muere antes de la página 20, será otra presencia fundamental en la obra. Su música y su magia impregnarán con fuerza las 70 páginas restantes.
Sampayo se luce con grandes diálogos, un entramado complejo entre este elenco numeroso, un ritmo intenso pero con las pausas necesarias para desarrollar a los personajes, y hasta se da el lujo de bajar línea acerca de la sociedad moderna y sus flagelos. Zárate no se queda atrás. Sostiene con una narrativa cristalina la complejidad y los vaivenes de la trama, le crea un look 100% creíble y coherente a cada personaje (hasta a los que aparecen tres viñetas), se mata en los paisajes tanto urbanos como rurales, se luce en las expresiones faciales y pone toda la carne al asador a la hora del color. La paleta de Zárate es magistral. Sutil o estridente, sugestiva o impactante, siempre se acopla con maestría a lo que pide la historia. Pero lo que más llama la atención es que uno mira una página de Zárate y se convence de que hacer eso es fácil, de que el dibujante saca las páginas con fritas, como si dibujar y pintar así fuera lo más natural del mundo. Seh, claro…
Fly Blues es una historieta adulta de altísimo nivel, una oda al arte, a la búsqueda de la belleza, condimentada con una trama donde se conjugan el amor, la solidaridad, el respeto por los maestros y una dosis jodida de sangre, violencia y corrupción que desentona un cachito con el resto, pero que está muy bien mostrada. Música, maestros!

8 comentarios:

Gonzalo dijo...

pero el dibujo es una garcha.

Martín D. dijo...

Muy buena reseña Andres, me impactó muchísimo la crudeza con la que actúan los asesinos de Meadows, el detalle de la filmación con celular lo hace tan contemporáneo y veraz que llega a incomodar.-
Concuerdo 100% con vos con respecto a la Fierro, si bien siempre es valorable la calidad de algunas historias, se hace muy tedioso leerlas así. Me paso con Fly Blues, con Nocturno y lamentablemente con Vitamina Potencia. Lo choto es que no creo que haya alguna solución.-

Saludos!

Andres Accorsi dijo...

Para mí la solución es NO editar novelas gráficas en fetas. La Fierro se puede llenar mes a mes con historietas unitarias y series en formato episódico. Y las novelas gráficas, que las editen en libro, o que no las editen. No es tan complicado...

garufa dijo...

No se, no me parece tan simple.Yo no tengo Visa y no se frances(no se si esta editado en castellano, creo que no), estaria buenisimo que alguien se juegue y edite el libro
Pero que editorial hace eso? Sudamericana editaria Guastavino o como va hacer el Hipnotizador si no hubieran salido en Fierro?
Ivrea lo hubiera hecho con Nocturno?
No se, te parece Andres que hay interes de editar cosas de argentinas editadas afuera?
Por que no hay una edicion de Alack Sinner local por ejemplo? Si Fantagas de Nine no sale en Fierro cuanta gente puede comprar la edicion de Sinsentido que las comiquerias te cotizan a 8 pesos el euro cuando la tienen o la encargas?
Creo que el problema no es solo que Fierro haga eso, sino que sea el unico lugar por donde acceder.

Andres Accorsi dijo...

Estoy de acuerdo, estimado.
Yo no digo en ningún momento que tengamos que conformarnos con las ediciones francesas o españolas, porque es obvio que es poquísima la gente que puede acceder a ellas.
Y sí, lo ideal sería que las editoriales argentinas publicaran estos trabajos en el formato en el que fueron concebidos, como novelas gráficas, sin una pre-publicación previa.
La Burbuja de Bertold no salió cortada en fetas en Fierro, y sin embargo tiene una magnífica edición nacional, cortesía de Historieteca, que hizo lo mismo con Boggart. Ivrea publicó Legión (también de Sanz) sin pre-publicación en ninguna antología. Con el tiempo, esa tendría que ser la regla, no la excepción.
Y no, yo tampoco tengo la más puta idae de por qué no hay edición argentina de Alack Sinner. Posta, le doy vueltas al asunto pero no lo logro entender...

garufa dijo...

Tambien estoy de acuerdo, lo de Historioteca es buenisimo(compre sus libros) y parece una patriada ,creo que deberia ser una regla y no la excepcion.Es verdad tambien lo de Legion.
La verdad lo que nos agobia es la falta de espacios.Publicaria Fierro novelas graficas en fetas si habria una verdadera industria? creo que no.
Muy bueno el blog, sobre todo por la variedad,.No leo casi nada de manga ni comic norteamericano mainstrean pero el blog me sirve como guia.Gracias por Tony Sandoval lo adopte.
La verdad esta bueno sacarse prejuicios e investigar.

Anónimo dijo...

Con esta historieta, lo de estar cortada en fetas no me jodio tanto como con Nocturno, ni tampoco en Vitamina Potencia, me quedaban los puntos claros, y en algunos caso (que no siempre), los cortes me parecian correctos, puede ser simplemente porque yo no tenia idea de que la historia estaba planificada como novela grafica, sino que pensaba que era ese el metodo de publicacion elegido, sin preconceptos que me alteraran.
De la forma que sea, la disfrute y fue entretenida, tal vez no me llego porque de musica no se mucho y la verdad nunca le he dado demasiada importancia, pero igual me hizo pasar un buen momento, y el dibujo quedaba muy bien. Creo que no tengo nada mas para decir, solo que mi padre no lee las historias largas cuando salen, espera a tener todas las Fierro, y las lee de corrido, no se cuanta gente hara eso.

Error Macross

Lobezno Narniano dijo...

Acá coincido con el primer comentario.