el blog de reseñas de Andrés Accorsi

jueves, 23 de diciembre de 2010

23/ 12: FANTASTIC FOUR/ INHUMANS


Este tomo recopila dos sagas, una originalmente publicada como miniserie (Inhumans, 2000) y la otra serializada en 2002 en la revista Fantastic Four, justo en el bache entre la partida de Carlos Pacheco y la llegada de Mark Waid y Mike Wieringo.
El mismo Pacheco es el guionista de la mini de los Inhumans, un comic más político que superheroico, con más intriga palaciega que machaca, en la que cambia el status quo de la familia real liderada por Black Bolt cuando Attilan pasa a ser una especie de fortaleza espacial que vaga por el espacio y el monarca y su familia son expulsados de la msima por el resto de los inhumanos. Pacheco trabaja bien las personalidades de los protagonistas, le da mucha chapa a Ronan the Accuser y relanza el concepto de Starlord, creado por Steve Englehart en los ´70.
Pero lo más impactante es el dibujo. El astro mexicano José Ladronn se propuso clonar (dentro de lo humanamente posible) el estilo en el que Juan Giménez hacía La Casta de los Metabarones, y esto se ve por todos lados: las naves, las armas, los trajes, las caras, por supuesto la paleta de colores, con esos engamados donde priman los colores fríos… impresionante. Pero Ladronn fue más allá y hasta se decidió a contar la historia como si en vez de un comic-book yanki fuera un álbum francés, con muchísimas páginas de 10 viñetas, pocos primeros planos y demás. Agobiado por la magnitud del laburo, se bajó antes de terminar y el último episodio cayó en manos de Jorge Lucas (el autor de Cazador) quien –dentro de los lineamientos planteados por Ladronn- metió bastante de su impronta personal, mucho más cerca de Jack Kirby que de Juan Giménez.
En la segunda saga, el siempre correcto guionista (y magnífico entintador) Karl Kesel se propone cerrar alguna puntas argumentales que dejó abiertas Pacheco cuando se desvinculó de los Fantastic Four. Acá tenemos la resolución del plot de Johnny y su carrera de actor en Hollywood, el misterio de Senso y su relación con los poderes de Ben, y el nacimiento de la nueva hijita de Reed y Sue. Y además nos enteramos a dónde fueron a parar Black Bolt y los suyos cuando los rajaron de Attilan. O sea que, para cuatro episodios, hay material de sobra. Sumémosle una acertada bajada de línea contra la xenofobia y la discriminación (otra, porque la de Nemesis de ayer no alcanzó) y una participación del glorioso Dr. Doom que llenará de emoción a todos sus fans (me incluyo, por supuesto) y tenemos una saguita que –sin ser una joya fundamental- te deja mucho más satisfecho que el típico artefacto de continuidad para restaurar o cambiar el status quo de una serie y dejársela prolija y lisita al equipo creativo que se está por hacer cargo.
Eso sí, hay que aguntar los dibujos de un Mark Bagley no muy inspirado y fuera de sintonía con los tres entintadores (repito: tres entintadores) que le meten mano a su trabajo a lo largo de estos cuatro episodios. Me imagino lo que debe haber puteado Bagley, que se siente a sus anchas dibujando a los pedos, sacando las páginas con fritas, cuando le dijeron que le tenía que agregar a los trajes de los Inhumans todos esos detallitos microscópicos que le había agregado Ladronn en la miniserie… Pero bueno, con buena voluntad se sobrelleva.
Ahora sí, ya no tengo excusas para no entrarle a la etapa de Waid y Wieringo en Fantastic Four, que todo el mundo me dice que es alucinante. La tengo entre mis prioridades para 2011, a full.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Andre, si no lees la etpa de waid y weringo, sos un balin. Es lo mas lindo que le puede pasar a los fanaticos de los 4 f, agarra cosas viejas, y las licua y te da una re historia... la etpa esta de los inhumanos no la lei, pero sabes que numero son? o si salieron en la edicion de panini? las tengo que buscar y no las encuentro, ..


El Chavez

Anónimo dijo...

Otra cosa, que se que te jode, aguante Tom De Falco Carajoooooooooooooooooooooooooooooooooooo


El Chavez

Capitán Manu dijo...

Siempre creí que Ladronn era una bestialidad de dibujante, incluso allá por los ´90, cuando dibujaba Cable, me acuerdo de ser el único nabo que lo defendía. Primera vez que un dibujante me obligaba a comprar una serie mutante cada mes.
Con el tiempo el tipo dejó de imitar al hijo posible de Kirby y Moebius y empezó a dibujar con una fuertísima influencia de Jimenez como decís y tenés razón, creo que lo primero que vi en ése estilo fueron las tapas de Planet Hulk, no?

Buenísima la reseña, un día me vas a convencer y voy a empezar a leer Fantastic Four!!

Andres Accorsi dijo...

Estos son los números 51 al 54 de Fantastic Four, Chávez. Obviamente, estamos hablando de la colección que arranca en 1998 con Scott Lobdell y Alan Davis.
Y la verdad es que Tom De Falco en F4 fue un palo en el orto del grossor de una palmera...

Raptor Plateado dijo...

que se muere uno de los 4 fantasticos!! no!!!