Y se terminó el glorioso Thor de Dan Jurgens. Queda un tomo más, cortito, casi un epílogo, escrito por otro autor y prometo leerlo pronto. Pero la saga grossa, la epopeya definitiva de Thor que se animó a llevar al rubio a donde nunca nadie lo había llevado, llega a su fin en este voluminoso tomo que abarca nada menos que 12 episodios.
El dibujante es del montón, es cierto. Pero de los 12 episodios dibuja 11! Después de tanta rotación entre tanto pecho frío incapaz de comprometerse a mediano plazo con la propuesta de Jurgens, la verdad es que uno ovaciona a Scott Eaton como si fuera... Alan Davis. Y sí, Eaton se esfuerza MUCHO por parecerse a Alan Davis. Tiene viñetas en las que trata de ser Neal Adams y en la inmensa mayoría, chorea a mano armada a Davis. Claro que Eaton no llega ni cerca de la magia del británico. Sin ser desastroso ni mucho menos, el dibujo se ve adocenado, falto de imaginación, cumplidor –es cierto- pero para nada descollante. Y el capítulo que no dibuja Eaton se lo dan a Roger Robinson, aquel que dibujara muchos años la serie de Azrael, mejor que en aquella etapa, pero también lejos de lo que se veía en esta serie cuando la dibujaban John Romita Jr., Andy Kubert o Stuart Immonen.
El guión pega otro salto mortal. Olvidate de los míseros mortales y sus problemitas de entrecasa. Ahora es la hora de los dioses y Jurgens se concentra en la familia real asgardiana, su séquito, y ya sobre el final, en dos personajes a los que él mismo creó: Desak y Tharene, que tendrán roles muy destacados en los últimos episodios. De nuevo, hasta que nos acercamos mucho al final, escasea la machaca y gobiernan la intriga palaciega y los dilemas morales, la eterna discusión acerca de si Thor acierta o se equivoca al imponer su poder por sobre la rastrera y descarriada humanidad.
Para que todo esto sea más heavy y más dramático, Jurgens nos lleva al año 2170, cuando ya hace casi 170 años que Thor gobierna a nuestro mundo con mano de hierro. Pero no es el Thor copado, sino un tipo curtido, duro, implacable. Muchos de sus amigos murieron, o fueron exiliados, o desaparecieron. Tuvo un hijo con Amora, la Encantadora. Y perdió un ojo, un brazo y a Mjolnir. O sea... está todo tan mal, tan podrido, tan irreconocible, que vos sabés que –tarde o temprano- va a volver todo para atrás. Y efectivamente, esta línea temporal será desactivada sobre el final del tomo de modo bastante coherente (no nos olvidemos que el poder Thor acá ya es infinito) para que todo vuelva a un punto más “negociable”, en el que las manos de Thor no necesiten enchastrarse con la sangre de un genocidio.
Esto significa que al final, cuando no tiene más remedio, Jurgens juzga las acciones de Thor y decide que el héroe, el dios, el poderoso paladín, estaba meando afuera del tarro, mal. No le cobra muy caro, porque la nobleza de Thor hace que, aún en el error, el hijo de Odín mantenga altísimo su ideal de una vida mejor para todos. Pero lo obliga a recapacitar y, finalmente, a dar marcha atrás. Y nos deja para la posteridad una saga impresionante (en la que pasan miles de cosas que uno creía que sólo podrían pasar en un comic tipo Miracleman), y un futuro alternativo, de esos que los guionistas de Marvel no pueden dejar descansar ni aunque lo intenten, en el que Thor terminó por ser un déspota pasado de rosca, sólo por querer ayudar a unos humanos de mierda que nunca se lo supieron agradecer. Grossitud eterna.
Si amás al Dios del Trueno, a Loki, Sif, Balder, Amora y demás próceres asgardianos, tirate de cabeza al Thor de Dan Jurgens. Son 10 libros (más el epílogo, 11), es una guita importante. Pero posta, se justifica a full. Y además falta muchísimo para que salga una nueva saga de Thor que le haga el aguante a esta...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
13 comentarios:
acá thor tambien habla en ese inglés antiguo tan insoportable?
No, casi nunca.
Bueno paponga, me recontra cebaste. Anoché terminé de leer tu reseña asgardiana y cerré un pedidito de amazon con el broli 1 del Thor de Jurgens. Después de Simonson medio que me daba miedito agarrar algo por miedo a que me de gusto a poco. Pero venís militando esto tan fervorosamente que por algo ha de ser
Seguro lo vas a disfrutar! Esto es grosso de verdad!
Una pregunta decolgada. ¿Se sabe cuánta guita le pagó DC a Charlton cuando compró su línea de superhéroes (Blue Beetle, etc), en 1968?
A ver si el anfitrión o algún otro estudioso consigue el dato.
abrazo
Perdón, corrijo, la compra de Dc a Charlton no fue en 1968, sino en 1983.
Andrés, una pregunta. ¿Se publican los libros de Liniers en otros idiomas? Me parece una tira impresionante que estaría buenísimo si se conociera en muchos países. ¿Llegó a ese nivel de popularidad o todavía no?
Andrés, urgente tu opinión acerca del retiro del libro del Inspector Justo de las escuelas mendocinas.
Hoy después de leer los comentarios de los lectores de La Nación en los que a Sanyú lo tratan de "PORNOGRAFO" casi me agarra un ACV.
Gervasio, tendría que buscar el dato. No creo que haya sido mucha plata. Fue un regalo que Paul Levitz y Jeanette Khan le hicieron a Dick Giordano.
Bruno, sí, Macanudo se publica en seis o siete idiomas y es bastante conocida fuera de Argentina.
Anónimo, ni en pedo coincido con los retrógrados que califican de pronógrafo al maestro Sanyú. Tampoco coincido con el funcionario que evaluó que El Inspector Justo es una historieta que puede ser leída por menores de 16 años.
Fue un cagadón lo de mandar El Inspector Justo a las secundarias (y aparentemente mandaron también el libro de Capusotto, que me parece otra mala decisión), pero como dice Andrés, de ahí a tratarlo de pornógrafo...
Yo leí varias Fierro ochentosas cuando tenía unos 14 años y creo que muy mal no me hicieron, pero creer que eso es material apropiado para poner al alcance de los pibes en una escuela es mear para afuera del tarro mal.
A mí me suena a que hubo tongo con Colihue, que les vendió cualquier clavo que tenían y los mandaron a las escuelas sin pensarlo. Decí que esa editorial nunca sacó El Instituto ni ninguna de las secuelas, sino ahí si que estaríamos hasta las manos.
El tongo con Colihue no es ningún secreto, el dueño de esa editorial es otro sorete K perteneciente a ese grupo de cráneos conocido cómo Carta Abierta, y es uno de los más beneficiados de las compras masivas de material para colegios...y bue, que le aproveche porque se les termina la joda...
Andres,
Fui leyenmdo el final de esta serie en la edicion de su momento de Panini, y nunca entendì como pasó tan desapercibida. Le da una chapa increible a Jurgens, no sólo por los argumentos, el tener los huevos para llevarlo hasta donde lo llevó, sino también por tomarse la pausa para la caracterización de personajes y el ambiente (hay un numero, cerca del final, que lo dedica a contar cómo es la vida de la gente común en esta nueva tierra). Se entiende porqué tuvieron que cerrar el volumen y dejar descansar al personaje por 5 años. Fue muy grosso
Dejense de joder, che. No es que "dejaron descansar al personaje", es que no vendía. Si Thor hubiera tenido la misma demanda que tienen Wolverine o Batman nunca hubiera dejado de tener su título mensual por más grandiosa que fuera la historia de Jurgens.
Publicar un comentario