el blog de reseñas de Andrés Accorsi

lunes, 8 de julio de 2013

08/ 07: ENEMIGO

Si algún día te pasa lo mismo que a mí, o sea, si te hacés MUY fan de Jiro Taniguchi y empezás a revolver cielo y tierra para conseguir todas sus obras, tarde o temprano vas a caer en Enemigo (no es una traducción, se llama así en todos los idiomas), el manga que el ídolo publicó entre Diciembre de 1984 y Abril de 1985 en la revista Play Comic. Yo conseguí a buen precio la edición francesa (una belleza) y caí. Pero no es mucho lo que tengo para decir a favor de Enemigo.
Lo mejor que tiene este manga es la narrativa. Taniguchi le pone garra, ritmo, logra un acierto atrás de otro en un registro (el del comic de acción y aventuras) que claramente no es el que más le interesa. Ojo, sin innovar desde lo formal: no creas que acá vas a ver las fascinantes piruetas narrativas que le vimos hacer en Hotel Harbour View (otro clásico ochentoso del maestro, bien de género) porque no vas a ver nada ni remotamente parecido. Esto es mainstream, bien lineal, bien cabeza. Una locomotora que avanza a gran velocidad por una senda que jamás se ramifica. Ni siquiera la veremos detenerse: la historieta termina un cuadrito después de que el bueno mata al malo. Hay un par de esos momentos pachorros, de contemplación de la naturaleza, que tanto le gustan a Taniguchi, pero lo que predomina es la sensación de “palo y palo” tan clásica de las películas de acción yankis de los ´80.
De hecho, si no fuera porque el tipo al que tiene que rescatar Kenichi es su propio hermano, esta podría ser tranquilamente una misión de Rambo: jungla centroamericana, guerrilleros armados hasta la chota, comandos pulentosos entrenados por los yankis para combatir en Vietnam, una mini-intriga político-empresarial para darle un trasfondo creíble a la epopeya, y ya está. O también podría ser una misión de Golgo 13, porque Kenichi además de matar gente a lo pavote, se comporta como el clásico macho recio, frío e implacable, del que se enamoran las minas y al que hasta sus rivales admiran por su chapa y su eficacia. Como en Golgo 13, el guión no tiene subtextos ni sorpresas: los malos son los malos, los buenos son los buenos y al traidor lo ves venir a 15 kilómetros. Nada se da vuelta ni se resignifica a último momento, todo está todo el tiempo bajo el control de un personaje monolítico, al que ningún sacudón logra desestabilizar. Es gekiga clásico, sí. Pero también es un embole. Por suerte el guión no se lo podemos endilgar a nuestro Jiro favorito, sino a M.A.T., sigla que reúne a tres guionistas que eligieron (con buen tino) el anonimato y cuyas identidades se desconocen aún hoy, casi 30 años después de la aparición de Enemigo.
El dibujo es bien típico de este período de Taniguchi: oscuro, realista al mango, con más detalles que en su período posterior (esto es apenas un año anterior a La Epoca de Botchan, pero parece hecho un siglo antes), con la influencia marcadísima de Vittorio Giardino y Attilio Micheluzzi, que en aquel entonces trabajaban en historietas policiales también muy realistas y muy jugadas al claroscuro. Lo menos europeo que tiene Enemigo es el manejo (sublime) de las tramas mecánicas y las líneas cinéticas. Fuera de eso, esto es comic europeo, caprichosamente protagonizado por un japonés (que bien podría haber sido yanki, francés o argentino). Como siempre, Taniguchi mete mucha referencia fotográfica, aunque acá todavía no está tan bien integrada a su grafismo como en sus trabajos posteriores. Y donde sí está cancherísimo es en el uso del color: ya sea en unas poquitas páginas del manga o en las ilustraciones que complementan a esta edición, el ídolo te masacra con una paleta bien francesa, tipo François Schuiten, repleta de magia, sutileza y magníficos trucos de iluminación.
Esto es sólo para MUY fanáticos. Si amás al Taniguchi parsimonioso, el de las historias urbanas en las que la gente camina por los parques hablando huevadas durante miles de páginas en las que no pasa nada, esto te va a parecer alienígena. Si amás al Taniguchi más extremo, el de los héroes recios que escalan montañas o edificios, o se enfrentan a animales salvajes en paisajes agrestes, por ahí te cierra un poquito más, aunque el dibujo no sea tan genuino, tan respetuoso del estilo que el propio maestro forjó. Y si lo que más te gusta son los guiones, agarrá para otro lado, porque en la jungla de Enemigo acechan la chatura, la violencia innecesaria y el pochoclo en mal estado típicos de las películas mediocres de Chuck Norris, Schwarzenegger y Stallone.

14 comentarios:

Anónimo dijo...

Que haces gordo sobon. Asi que ser nacional y popular es cobrarle un impuesto al salario de los trabajadores para que el gobierno se lo robe o se lo de a Fito Paez? Hae una nota de eso gordo sobon, o del neonazi Delia y sus negocios millonarios. La proxima vez anda y besa suelo ingles, tanto que te gustan los gringos, sobon.

Anónimo dijo...


... me parece que alguien estuvo mirando canal 13


anonimo dolape

Sucubo dijo...

Anonimo algunas precisiones: "D'elia" va con apostrofe, "Hace" lleva "C", "sobón" con acento y besá como imperativo aquí se acentúa, como tu boludez con el paso del tiempo.

Anónimo dijo...

Típico, cuando se quedan sin argumentos critican la ortografía.

Que triste.

Sucubo dijo...

Discúlpame pero cual es tu argumento? Que Accorsi es bufareta? (me imagino que eso queres decir con sobón).
Como se te ocurrió tamaño silogismo? leyendo a Sartre? o fue a Foucault?
Pero si queres un argumento ahi va uno: John Rawls plantea en su obra sobre la sociedad liberal (en un sentido político y no económico) que la verdadera paz social se alcanza no con la uniformidad sino con el respeto a la diferencia. Yo en particular no apoyo a este gobierno, no lo vote ni pienso hacerlo. Pero, alguna razón que yo desconozco, gran parte de la población elige hacerlo. Creo que están equivocados pero de ahí a insultar al autor de una nota sobre comic japones porque no denuncia los negociados de D'elia es de una muestra de intolerancia preocupante.
Hay muchas formas de ser neo nazi, ademas de la del impresentable de D'elia. Cuidate porque podes terminar al lado de gente que después te va dar vergüenza ajena.
Ahora podemos seguir hablando de historieta?

V dijo...

Sucubo, unas precisiones. Saca la cabeza de tu culo porque la tenes llena de mierda. Ademas yo no soy el del mail de " tipico, cuando...",. Ese fue otro lector, o te crees que todos los apoyan salame. Bien por ese lector, debe ser un laburante la que le ponen el impuesto a la ganancia. Ah pero vos eso no los sabes sucubo, porque vos debes vivir de un plan social o anda saber de que, y no sabes lo que es trabajo. Ah, contame ahora las faltas de ortografia, porque la verdad ni me calienta corregir la ortografia en este blog sobon. Lo que da verguenza en este pais es gente como vos que defiende lo indefendible, como el choreo y el saqueo. Pero nada es eterno. O que le paso a Nestor? No era mas fuerte que Dios?

Sucubo dijo...

V: Me debo haber confundido porque como los dos no ponen el nombre como que son igual.
Segundo: No vivo de un plan social. Trabajo promedio 10 o 12 horas al día y pago ganancias o la menos eso dice mi contador. Y no banco el saqueo. Pero no todo el mundo que piensa como vos es un mantenido del estado o un negro de mierda.
Tercero, políticamente no banco a Cristina y espero que se vaya lo antes posible. Quiero que esto cambie y trabajo para eso. Entre otras cosas, el domingo de elecciones soy fiscal de un partido de la contra. Que por supuesto va a perder como en la guerra.
De lo que estoy en contra es del insulto como forma hacer política. Sea del signo que sea. La gente que piensa como los K no son todos negros de mierda comechoripan y la oposición una manga de fachos y boludos coptados por clarin.
Venir a un blog que esta hablando de historieta japonesa y insultar al autor (que por otra parte no te cobra por el contenido que genera) en forma anónima porque no denuncia a D'elia es gratuito, es intolerante y es cobarde porque no se da la cara.
Y si esa es tu estrategia para cambiar las cosas no me extraña que entre cristina y su ex jefe de gabinete tenga mas del 70% de la intención de voto

V dijo...

Ja ja ja. Bueno deciselo al dueño del blog que es el que se encarga de denigrar a todo el mundo por este blog, que piensa distinto. Si queres que nos veamos la cara, pone un dia y un lugar para encontrarnos sucubo, ahi te vas a dar cuenta quien es el cobarde. Sucubo es tu nombre o apellido? o te estas diciendo cobarde a vos mismo que estas bajo el anonimato? Cuando quiera nos vemos la cara los dos, no hay problema. Salame. 70 por ciento de intencion de voto ja ja jaja que risa. Contate uno de vaqueros ahora. ja ja

Anónimo dijo...

Me hizo reir la palabra "sobón".

Andres Accorsi dijo...

A mí también. Nunca la había oído.
Che, rabiosos anti-K, antes por lo menos tenían la decencia de esperar a que yo mencionara a Cristina o a Clarín en un post antes de sali a desparramar odio. Ahora ya saltan hasta cuando nadie los pincha. ¿Qué les pasa? ¿Están nerviosos?

Anónimo dijo...

Cosecharas tus siembras...

Anónimo dijo...

Todo es culpa de Acordi por no hacerse un blog especial para sus opiniones políticas. Ahora vienen los trolls a molestarlo acá y embarran la onda del blog.

Anónimo dijo...

Andrés, a propósito de todo esto que se generó alrededor del adjetivo, ya lo dice tango: ¨el hombre como el caballo cuando ha llegado a la meta, afloja el tren de carrera y se hace manso y SOBÓN¨. Espero que no sea así!! quiero seguir leyendo reseñas, no me afloje el tren de carrera!! jaja

anónimo dolape

Andres Accorsi dijo...

Tranquilo, Anónimo. Seguirá habiendo reseñas todos los días por un largo tiempo, putee quien putee.