el blog de reseñas de Andrés Accorsi

viernes, 18 de octubre de 2013

18/ 10: EL GENERAL SAN MARTIN: PROCER

Le entré a este libro con ínfimas expectativas, convencido de que iba a leer una historieta apenas competente. Cuatro dibujantes distintos (ninguno de mis favoritos), una novela cortada “en fetas” para ser distribuída en fascículos junto a un diario que no leería ni con un chumbo en la cabeza, una primera hojeada que revelaba una cantidad cuasi-infinita de splash-pages... Rápidamente, y a pesar de la majestuosa portada de Fito Migliari, me convencí de que iba a leer una biografía del General San Martín decididamente floja, escrita por Luciano Saracino sin onda, sin placer, para pagar las expensas. Por desgracia, la lectura de la obra confirmó casi todos mis prejuicios.
Creo que donde menos le emboqué es en lo de la pasión. En un punto de la lectura, le empecé a creer a Saracino que realmente se interesó por el personaje, como si la fuerza del prócer se llevara puesto al guionista, lo envolviera y lo empujara hacia ese lugar donde se para Luciano para contar la historia (que es la que todos sabemos). Por supuesto, en 82 páginas es imposible contar toda la vida de San Martín. Saracino se da cuenta, analiza qué público va a leer esta historieta y en base a eso elige con qué quedarse. Y elige la hagiografía, que es algo que a mí no me cierra cuando leo una historieta biográfica.
Este San Martín es más San que Martín. Es más celestial que humano. No tiene defectos ni contradicciones, no participó en ninguna runfla espúrea (no hay una sóla mención a la Logia Lautaro, no se indaga en la misteriosa muerte de su esposa, NADA), no se nos ocurre siquiera sospechar que alguna vez haya hecho algo que no fuera arriesgar su vida de modo heroico y altruista por la libertad de nuestro continente. En un momento, el guión se hace cargo de que las autoridades de Buenos Aires lo consideraron “un traidor” y lo acusaron de “conspirador”. Y ya está, no se enfatiza en lo más mínimo en ese aspecto. “Es todo un pase de facturas porque San Martín no quiso pelear contra los caudillos del Interior sublevado”, explica suscintamente Saracino, para enseguida volver a concentrarse en la grandeza inmaculada del prócer. Desde el momento en que San Martín entra a Lima dos páginas antes del final, es obvio que la novela va a dejar MILES de cosas afuera, casualmente todas las que generan ciertas dudas acerca de la intachable moral del protagonista que nos quiere vender la historieta.
Los textos son bastante abundantes (quizás para compensar el exceso de splash-pages) y levantan vuelo en la secuencia narrada por el cóndor. En el resto de la novela son correctos, casi siempre con la responsabilidad de llevar adelante la narración. Porque si miramos sólo los dibujos, no sólo se entiende menos de la mitad de lo que pasa: también nos vamos a aburrir mucho. El dibujante que más me convenció es Rafael Ortiz que, sin ser espectacular, me pareció el más completo, el menos precario. Después hay varias cosas rescatables en las páginas de Tomás Aira al que, uno supone, le debe resultar incómodo narrar en un estilo tan clásico y con tanto apego por la anatomía tradicional. Acá se ven pifias, pero menores. Yair Herrera es un clon de Rafael Ortiz, con menos recursos, al que le complicás bastante la vida cuando lo sacás de los primeros planos (que evidentemente son su fuerte). Y finalmente Pablo Churín es un dibujante muy limitado, no impresentable, pero lejos de un nivel atractivo. A todos les salva bastante las papas el muy buen trabajo del colorista Gonzalo Duarte, a todos se les nota la escasez de pilas para dibujar fondos, la falta de imaginación, de huevos... En promedio, esto es peor que malo: es chato. Y la verdad que ver a Mauro Mantella, uno de los guionistas más zarpados y más creativos que aparecieron en este siglo, desaprovechando su talento como letrista de esta historieta, es para clavarse el sable corvo de San Martín en el ojete e inventar el seppuku anal.
Esta historieta nos propone seguir el derrotero de un José de San Martín excesivamente edulcorado e idealizado, como el Héctor Oesterheld que nos mostró Saracino en la recordada Germán: Ultimas Viñetas. En la tele, quizás por las dimensiones trágicas del personaje, o porque la mayoría del público conocía mucho menos de los pormenores de su vida, ese enfoque funcionó. Acá, mucho menos. Repito: lo que menos ruido me hizo fue la prosa cuidada, fina, por momentos emotiva de Saracino. El resto, bastante para atrás.

17 comentarios:

Luciano Saracino dijo...

No me quedó muy en claro qué te pareció el libro, Andrés...
:)
Nahhh... Gracias por la reseña, maestro! Y, como siempre decimos, Palermo la mandaba afuera más veces de las que la metía.

Igualmente, debo decirte que disfruté mucho escribiendo este libro (lo que no quiere decir que lo haya escrito bien, claro) y que el laburo de los dibujantes a mí me parece muy bueno.

Anoto cada una de las cosas que mencionás. Sabés que siempre lo hago.

Abrazos!

Gustavo Ippolito dijo...

Yo en cuanto vi el dibujo de Migliari en la que se hacía el paralelismo con Superman, le huí despavorido y me imaginé que era una historia acorde a los "revisionismos" históricos antojadizos de estos años.

Si hasta me imaginaba una última página en donde aparecieran mirándonos desde el cielo San Martín, Perón y Kirschner. :p

Anónimo dijo...

que tanto escribio mantella para que sea uno de los más zarpados y creativos? y german también es bastante floja.
facu

Anónimo dijo...

Una pena, me parece que una de las pocas "deudas pendientes" de la historieta argentina, son buenas historietas históricas de ese período.

Anónimo dijo...

yo no sé qué tanto escribio Mantella, pero lo que me llego es todo redondo, efectivo, entretenido, exacto, imaginativo y... en fin, muchos pensamos como Andrés, me parece...

gaspar

Anónimo dijo...

fantaciencia es soporifera y aburrida, facu

Daniel Barragán dijo...

¡VIVA ABRAHAN LINCOLN CAZADOR DE VAMPIRO! LOS YANKIS LA TIENEN RECLARA.

Alan Brito Delgado dijo...

La verdad es que sos un gordo pelotudo, hablas del laburo de los demás con tal liviandad que das asco, ¿vos te viste lo que sos ? ¿te la crees en que sos un groso de la historieta ,no? La verdad es que sos un pobre tipo, vivis dando lástima, en tus charlas, en las convenciones, en mierdacópolis y en cada cosa que haces. ¿Viste que fácil es hablar mal del laburo de los demás? Bajate del poni Andrés.

Anónimo dijo...

Lo que es la hipocresía viejo, cuando habla mal de autores de afuera todos se cagan de la risa y bardean peor.
Pero si se trata de uno nacional lo defienden independientemente de la mierda inmirable que haga.

Anónimo dijo...

Con todo respeto porque no tengo nada contra él en lo personal, lei varias cosas de Saracino en comic, y ninguna me convencio, me suena todo a muy sacado con fritas, de Germán no pasé del primer capítulo, no solo me parecio excesivamente maniqueo, sino que era soporífero.Debe ser entretenido lo que escribe para un chico de 10 años, pero si sos mas grande...
Mantella también me parece inflado, Fantaciencia la idea era buena pero tambien me aburrio (la edición tampoco ayuda a la lectura), y Bizancio es simpatico, pero no deja de ser un afano a Hellblazer.
Los guionistas argentinos en actividad realmente grossos deben ser Agrimbau y Mazzitelli, el resto esta muuuuuuy detras...

Unknown dijo...

a mi de mantella me copó el hombre primordial, pero lo otro que lei de el no me llamó la atención gran cosa. Bah, sí lei un episodio piloto de bizancio en su momento y me quedé como "uh que groso" pero mas tarde conocí a constantine y bueh... lo que dice el anonimo de arriba.
Igual el tipo escribe muy bien (mas allá de que no siempre tenga argumentos geniales) y siempre espero a que un dia nos sorprenda con un historietón.

con respecto a san martin, me picó la curiosidad en su momento pero me espantaron un poquito los dibujantes, no porque sean malos sino porque tienen esa onda bryanhitchesca que a mi me parece un plomo.
Y la portada está muy grosa en cuanto a tecnica pero tambien se me antojó un "supersanmartin" XD

Unknown dijo...

ah y me sumo al petitorio de los que extrañan las caritas! :-(

jcarlosv dijo...

Fantaciencia es muy buena, lo que la mata es el formato. Quizás algún día podamos verla en otro tamaño. Una pregunta aparte: estuve en Mar del Plata y en una librería de saldo encontré TODO ES HISTORIETA: 50 HISTORIETAS DE JÓVENES CREADORES, coeditada por Página 12. Ni siquiera sospechaba de la existencia de este libro, y no pude averiguar mucho, salvo que es de 1990. ¿Hubo más como éste?

Andres Accorsi dijo...

Uh, qué flashback! Tengo tenues memorias de ese libro...
No, nunca hubo otra cosa parecida... El catálogo de la muestra del INJUVE del 2000 es lo único que se le acerca.

jcarlosv dijo...

OK gracias. Si le interesa a algún marplatense, se consigue en la librería El Remate, en la peatonal San Martín.

Anónimo dijo...

Esta bastante bueno ese libro, en Capital buscando se consigue, yo lo compre hace poco en una libreria de saldos de Corrientes...

Anónimo dijo...

bue, para empezar lo que dicen de constantine ya anularia lo de "y creativo". facu