Hoy cortito, porque tengo poco tiempo.
Este trabajo marca un nuevo pico en la producción conjunta entre el guionista uruguayo Rodolfo Santullo y el dibujante argentino Marcos Vergara, a los que ya vimos colaborar en Valizas y Cena con Amigos.
La Comunidad es una historieta extrema, a todo o nada, sin medias tintas, gobernada principalmente por la tensión, por una tensión exasperante. Me acuerdo que en la reseña de Valizas yo subrayaba la capacidad de Santullo de generar tensión y ponernos nerviosos cuando en realidad pasaba muy poco. Bueno, acá pasa de todo.
La historia es intensa, violenta, por momentos asfixiante. Como en Lord of the Flies, a medida que se deterioran los vínculos solidarios y la cultura y la civilización dejan lugar al “sálvese quien pueda”, la cosa se pone tan espesa, que uno sólo quiere que se termine. Y eventualmente se termina, justo cuando nos enteramos cómo enganchan las escenas de los militares y el camión con todo lo demás. Este es el pase mágico de Santullo, su toque de genialidad.
En las dos secuencias que transcurren en paralelo hay excelentes diálogos que definen muy bien a los personajes. La gran diferencia es que en la línea de los militares Santullo juega a mostrar un procedimiento, un trámite, como mucho un clima que en algún momento se va a enrarecer, mientras que en la línea de Brian, el Miope y el Pincho, el tono es mucho más “in your face” y la acción y la espectacularidad no se hacen rogar en lo más mínimo.
Lo cual constituye un enorme desafío para Marcos Vergara, que creo que nunca habia dibujado una historieta con tanta acción y tanto vértigo como La Comunidad. Una vez más, el prócer de San Nicolás sale muy bien parado y hasta logra transmitirnos la sensación de que a EL MISMO le causan escozor las animaladas que Santullo le hace dibujar. La frialdad de los militares y la salvajada de los... salvajes cobran vida y pegan fuertre gracias al trazo de Vergara, que –según cuenta en el libro- dibujó estas páginas con birome, una herramienta atípica en la historieta argentina actual (me acuerdo que Leo Manco le entraba con la birome a los guiones que le mandaban de Marvel en los ´90) a la que el autor le saca un provecho increíble.
La Comunidad bien podría llamarse La Genialidad. Es una historieta realmente perfecta, perturbadora y definitiva, de esas que se te quedan impregnadas en la mente mucho, mucho tiempo, hasta que te olvides de lo que era una cerca eléctrica.
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2 comentarios:
Si te sorprende ver que se dibuje directamente en birome, es por que no viste a los historietistas correntinos contemporáneos
eso me recuerda a salvador "birome" sanz, que habra sido de la vida de la misteriosa anita no?? al final se supo kien era?
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