el blog de reseñas de Andrés Accorsi

martes, 9 de diciembre de 2014

09/12: FABLES Vol.17

Y al final me clavé otro tomito de Fables. Que además me viene bárbaro, porque tengo poco tiempo para escribir y en este caso me ahorro todo el párrafo que habitualmente le dedico a los dibujantes.
Este libro trae un arco de cuatro episodios y dos unitarios. El arco central y el unitario de Navidad están dibujados por Mark Buckingham, ídolo absoluto, con una producción enorme que no va para nada en detrimento de la calidad. Y el unitario restante se compone de varias historias muy cortitas, algunas al filo del chiste largo, que quizás algún día tengan alguna conexión importante con alguna de las tramas centrales. Acá hay un mix de dibujantes, todos buenos: P. Craig Russell, Adam Hughes, Ramón Bachs y un combo muy interesante entre Zander Cannon y Jim Fern. Ninguno logra eclipsar a Buckingham, ni por asomo.
El unitario de Navidad arranca como un epílogo al arco principal (ahora vamos, bancá un toque) y termina por darle mucha chapa a Rose Red, que pareciera ser el personaje al que más carnadura, más complejidad y más peso en la trama le quiere dar el guionista Bill Willigham.
Y a su vez, el arco central es un epílogo a lo que sucedió en el Vol.16, es decir, al fin de Mister Dark a manos del personaje que se sacrificó para terminar con el villano, que –ahora sí la spoileo, si no no se puede seguir- no es otro que North Wind, el padre de Bigby Wolf y abuelo de los cachorritos que el lobo tuvo con Blancanieves. Bigby y su padre siempre se llevaron para el orto y el lobo fue un descastado, sin contacto con la casa real de su padre, y por lo tanto sin ninguna posibilidad (ni el más mínimo interés) de ocupar el trono vacante. Así que será uno de sus hijitos, encantadores humanoides con poderes y personalidades copadísimas, quien suceda al difunto abuelo como nuevo Viento Norte.
Por supuesto esto le permitirá a Willingham jugar a las intrigas palaciegas, con los sirvientes del anciano Viento Norte y la presencia de los otros tres Vientos Cardinales, que quieren digitar de algún modo los sucesos que tienen lugar en el Reino de las Planicies Heladas. Bigby va a tener que pelar cintura para sobrellevar todos los embates protocolares y cuasi-políticos que se tejen sobre su familia y, sorprendentemente, el rol de Snow White será menor.
En paralelo, para que haya un poco de acción en medio de este arco muy hablado, Willingham avanza con la historia de Bufkin, de regreso en tierras cercanas al reino de Oz, y ahora al frente de un intento de revolución contra el capanga que agarró la manija cuando este mundo fue liberado del yugo del Adversario. Hasta ahora ese plot da más para la peripecia y la joda que para algo relevante, pero uno ya sabe con qué bueyes ara y Willingham puede clavar el volantazo en cualquier momento y vincular esa trama con cualquiera de las otras del modo menos predecible que nos podeamos imaginar.
Así que lo de Bufkin es lo único que queda colgado para el próximo tomo (al que prometo entraele el mes que viene, así avanzo un poco con otras lecturas) porque lo de la sucesión del Viento Norte se resuelve (muy bien, con sorpresas pero también con coherencia) en este tomo. La verdad que la estoy pasando genial con Fables. Esto es mainstream de enorme nivel, un poco adictivo y sumamente disfrutable por adolescentes y adultos de ambos sexos, sin necesidad de estar muy curtidos en la lectura de comics ni de literatura fantástica. El año que viene, más Fables acá en el blog.

5 comentarios:

Erick dijo...

jefazo, no tiene ningún comentario acerca de las portadas de Fables??
Por lo demás, es una serie genial
slds

Dr. Manhattan dijo...

Hola Andrés. ¿Creés que el blog perdió lectores desde que cambiaste la política de los comentarios? La verdad yo antes entraba varias veces al día, aunque no comentaba, porque además de las reseñas (de las que comparto la mayoría de tus opiniones), los comentarios eran un show aparte (me encantaba la rivalidad entre los "oficalistas proaccorsi" y la "opo"). Pero hoy entro cada 4-5 días y sólo leo las reseñas. Una lástima. Saludos.

Andrés Accorsi dijo...

Erick, me gustaban más las portadas de James Jean que estas últimas, de Joao Ruas.
Dr. Manhattan, la verdad es que este blog no tiene fines proselitistas ni comerciales, con lo cual si aumenta o decrece la cantidad de lectores a mí me da exactamente lo mismo. El día que no entre nadie a leer las reseñas, lo voy a seguir haciendo igual. No mido el minuto-a-minuto sino que miro las estadísticas recién sobre el final del mes. Y creo que venimos bien, que no hay mayores variantes desde que se terminó la posibilidad de comentar en forma anónima.

Sucubo dijo...

Realmente extraño al bolsicartonero. La verdad que sin quererlo, te empieza a crecer y después no se va mas. Propiamente, es un hongo de esos que te agarras en la pileta.
Respecto de fables comencé a leerlo en la versión de ECC que luego desapareció merced a los encantos de nuestra política aduanera, así que llegué a la marcha de los soldados de madera. Eso es muy lindo, el resto ni idea.

jcarlosv dijo...

Hablando de política aduanera... yo sigo esperando libros que compré por Amazon y que debieron llegar en octubre. Alguien más ha tenido demoras?