el blog de reseñas de Andrés Accorsi

martes, 10 de mayo de 2011

10/ 05: SUICIDE SQUAD Vol.1


Esto es militancia pura. Me compré en libro comics que tengo hace mil años, que leí cientos de veces y que hasta recuerdo de memoria, diálogo a diálogo. Pero lo que hicieron John Ostrander y Luke McDonnell en esta serie es tan grosso que se merecen, 25 años después, volver a llevarse mi dinero.
El Squad salió en el momento justo, el momento mágico en que DC peló una especie de ametralladora que disparaba una atrás de otra un montón de series alucinantes. En ese panorama de innovación y calidad, el Squad se destacó, de una. Era uno de esos comics que uno compraba no sólo para disfrutarlo: también para comentarlo con los amigos “del palo”. Es que la serie de Ostrander y McDonnell tenía mucha más sustancia que el comic promedio. Para empezar, tenía muchos personajes y hasta los secundarios por momentos cobraban chapa de protagonistas. Y se la bancaban, porque estaban muy bien armados. Además, como el Squad se nutría de los villanos a los que los héroes capturaban, estaba lleno de referencias a esos otros comics, que por ahí uno no leía y los amigos sí, o viceversa. Después la cosa creció tanto que se dio la inversa: leíamos las otras series que escribía Ostrander (Firestorm, o Manhunter) para ver qué villanos aparecían, porque –casi seguro- iban a terminar enrolados en alguna misión futura del Squad. Y lo más importante: la cantidad de ideas que pela la serie en estos primeros ocho números. Uno, que ya la leyó hasta el final, ya sabe quién va a morir, quién va a zafar, quién va a traicionar, etc. Pero lo más sorprendente de leer el principio sabiendo el final es descubrir la cantidad de tramas copadas cuyas semillas ya están sembradas en estos primeros episodios.
Pero al que nunca leyó nada del Squad, al alienígena que se acaba de bajar de su plato volador, le tengo que contar algo que lo cebe, no lo puedo dejar en banda. Esta es la historia de una agencia de operaciones encubiertas al servicio del gobierno de los EEUU. Un escuadrón que realiza misiones sucias, que ningún ejército o comando oficial se animaría a realizar, con altísimo riesgo y sin red. Si algo sale mal, nadie los respalda ni los protege. El detalle no menor es que el escuadrón está integrado en su mayoría por villanos conocidos, que están en cana, y a los que el gobierno les ofrece participar de estas misiones a cambio de una reducción de sus penas. O sea que, además de que la consigna es tramposa y mugrienta, los convocados para llevarla a cabo suelen ser una manga de garcas sin el menor código ético. Para que la cosa no se desmadre, el escuadrón tiene entre sus miembros a varios héroes y heroínas, todos de la B Metropolitana y todos con varios conflictos jodidos, al límite. Para que la mezcla cuaje, hacía falta un personaje nuevo, creado por Ostrander a la medida (áspera y ambigua) de esta serie, que terminó por convertirse en un personaje central del Universo DC, tanto en el comic como en las series animadas: Amanda Waller, tal vez el personaje más rico e interesante al que jamás vimos ponerse calzas, máscaras o capas.
Además de un increíble semillero de plots a futuro, estos primeros números son grandes aventuras por sus propios méritos, repletos de giros impredecibles, escenas impactantes y diálogos memorables. Lo único que tira un poco para atrás es el dibujo de Luke McDonnell, por momentos muy duro en la anatomía, aunque bien en las expresiones faciales y notable en la narrativa y la creación de climas. Después del tercer episodio, las falencias de McDonnell se notan un poco más, porque cambian a un gran entintador como Karl Kesel por uno mediocrón tirando a choto como Bob Lewis. Igual, nada es peor que el Secret Origins, en el que los lápices de McDonnell son masacrados por las tintas de Dave Hunt, anticuadas y sin onda por donde se las mire. McDonnell, con el tiempo, va a mejorar. Creeme, yo ya leí todo el Suicide Squad varias veces. Incluso va a volver Kesel, y van a aparecer un par de episodios (y una miniserie de Deadshot) en los que McDonnell se va a entintar a sí mismo y la va a descoser. O sea que los padeceres gráficos son temporarios, son unos 15 numeritos, nomás.
Y bueno, ahora a esperar que DC se digne a publicar más tomos recopilatorios del Squad. Ya me engolosiné y quiero toda la serie reeditada en este formato y con esta calidad. La seguí fielmente de principio a fin, mes a mes, hace 25 años y esta relectura me cebó lo suficiente para bancarla a muerte una vez más. Pasa el tiempo y no hay con qué darle a este cóctel explosivo de acción al palo, runflas malignas y pésima leche que puso a John Ostrander en la lista de los guionistas imprescindibles de los ´80 y ´90.

8 comentarios:

Fede Velasco dijo...

Me volviste a cebar con el Squad, te detesto!!! Deci que por suerte tambien cai en la de comprarme este broli y mañana me lo entregan. Me parece que pasa arriba de la pila sin escalas.

Gastón dijo...

Cuando leí el material publicado por Zinco en los 80 me voló la cabeza.
Estoy esperando a que me llegue este libro el mes que viene para volver a disfrutar esas historias.
Y lo bueno es que ya esta anunciado el segundo tomo para Octubre! Bien ahí, DC!

Cuestionador dijo...

Que grosso el Squad loco, aguante Ostrander. Y grande la reseña Andrés, cebadora como nunca antes.

roberto dijo...

bueno el squad tiene un valor para mi importante. fue el primer comic book yanqui que me compre maso menos regularmente (claro habia que cpmprar a mile high y llegaba a los premios).yme costo un huevo pero la temrine completando la coleccion

Y sigue isendo hoy por hoy una serie impreisonante. ostrander manejaba los personajes onc una profundidad impreisonante. como decis hasta los secundarios secundarios el tipo que apoyaba en lasmi siones pelaba personalidad en laugn momento. y adems en seiro era todo descartable. vos sabias que la unica persona que no podia morir era waller.
hable ocn ostrander hace un timepo con el fb y estaba feliz y amdirado que de sudamerica lo conocieran. pero es que esu n grosso

Anónimo dijo...

Realmente una collección única, fundamentalmente por el manejo de personajes y el abanico de situaciones que podían pasar y que Ostrander manejo con destreza para sorprenderme más de una vez. En esta serie literalmente podía pasar de toso, traiciones, muertes romances, invadir Qurac ( o sea irak) , tres años antes de la guerra del golfo y da ahí a Apokolips.
Los personajes geniales, seguro que para los que seguimos la serie Boomerang y Deadshot eran lo máximo, pero Amanda Waller, Nightshade , Bronze tiger y hasta Rick Flag eran personajes interesantes.
Gracias a Perfil por una notita que publicó harán 20 años y que me hizo fijaarme en esta serie , la escribiste tú Andrés¨? , saludos y esperamos el tomo II, ojála la serie la rompa en ventas para que la publiquen enterita.

dibujante dijo...

Me cuesta creer que ya hayan pasado 25 años , tuve que hacer la cuenta varias veces y aún me parece que fué ayer que leí todo esto por primera vez . en paralelo con la Liga de Giffen .
Es tan Bueno todo que se me hace reciente , es Placer permanente leerlo y releerlo .
Buenísima tu reseña Andrés y coincido absolutamente con tu apreciación del Arte , en especial en lo referente a Dave Hunt .

Sebastián pXs dijo...

Hey! Que groso, hace poco empecé a comprar los numeritos sueltos del Squad y ya me leí hasta el 26, esperando ansioso la próxima tanda.
Me encanta. En cada episodio pasan MUCHAS COSAS. Quizás la página 8 es una viñeta que lees y no podés creer cómo no se la guardó para un buen cliffhanger a final de número.
Me había olvidado lo groso, divertido, hijo de puta que es Boomerang, porque algunos numeros lei en tacos de Zinco y porque nunca jamás volvieron a tratar al personaje en nivel.
Lo mismo con Enchantress, Nightshade o Rick Flag. Ni que hablar de Deadshot que se robaba la serie MAL, con una personalidad muy compleja e imposible de entender, pero a cada sorpresa que te da, no podes decir que no es algo que Floyd no haria (por suerte Gail Simone en Secret Six sabe usarlo).

Lo de McDonell es raro, no lo trago, pero como decis, es muy bueno en las expresiones faciales y en una serie como esta, garpa mucho. Y, viendo la tapa del TP, la verdad que con los colores de ahora se disimula muchísimo algunas debilidades que siguen perdurando en artistas actuales pero ya no están tan expuestas con un buen trabajo de color.

Ojalá salgan más TPs de esta gran obra para que la sigas analizando. Y te pido, arrancá alguna vez con Question que la leí entera hace poco y siempre es bueno cotejar impresiones con alguien de tu estampa comiqueril.

Saludos!

Andres dijo...

Este por lejos era mi comic favorito de las cosas que sacaba Zinco en su minuto... estaba revisando y para final de año tienen previsto sacar el volumen 3: Death is for Suckers y un recopilatorio de Deadshot en el que Ostrander está metido. Creo que me voy a anotar con un par de cosillas para recuperar esto en mi biblioteca.