el blog de reseñas de Andrés Accorsi

miércoles, 26 de mayo de 2010

26/ 05: CAPTAIN AMERICA: ROAD TO REBORN


Esta es la única serie regular de Marvel con la que estoy 100% al día. Recopilatorio que sale, recopilatorio que me encargo ni bien lo veo en el Previews. O sea que todavía no leí Reborn, que es donde varios amigos y colegas me han dicho que Ed Brubaker meó un par de hectolitros afuera del tarro y la serie sufrió un éxodo masivo de lectores que le bajaron la persiana indignados.
Cuando la lea comentaré qué me pareció, pero mientras tanto sigo disfrutando a lo pavote de lo previo, de los 50 números de esta serie que a partir del n°600 retomó la numeración de la original, la que venía de Tales of Suspense. La verdad es que el aporte de Brubaker a la mitología del Capi es definitivo. Hoy es, cómodamente, el guionista más identificado con el longevo personaje de Stan Lee para acá, por encima de próceres como Steve Englehart, Roger Stern, Mark Waid, o de Mark Gruenwald, cuya etapa tiene menos fans que la leucemia, pero se la bancó diez años ininterrumpidos al frente de la serie. Brubaker le encontró la vuelta al Capi, de eso no caben dudas. El regreso de Bucky, que presentado de cualquier otra forma habría desencadenado un tsunami de puteadas, merece ser ovacionado de pie. Y ni hablar de la forma en que el guionista trató al ex-compañerito del héroe, tanto en su rol de Winter Soldier como cuando le tocó vestirse de símbolo patrio tras la escalofriante muerte de Steve Rogers.
Prácticamente nada en esta serie tiene desperdicio. El equilibrio entre acción e introspección es brillante. Los constantes flashbacks al pasado de los personajes son emotivos y reveladores, nunca un relleno intrascendente. Los villanos resultan creíbles y verdaderamente amenazantes, no una manga de freaks y payasos con cero chances de ganarle a los buenos. Y los héroes reciben un tratamiento de lujo. Nunca hubo un guionista que escribiera tan bien a Falcon, Sharon Carter, Black Widow y Bucky. Más adelante, cuando empiezan a aparecer seguido Nick Fury, Iron Man y Hawkeye, Brubaker también los maneja de taquito, y los pone en escenas tensas, les hace decir cosas jodidas, los enriquece a ellos y al conflicto que los enfrenta (digamos que de Civil War para acá las cosas con Iron Man no están 10 puntos) con pinceladas sutiles y de enorme categoría.
Este tomo en particular es de pretemporada. Es obvio que el status de la serie se está por modificar radicalmente y Brubaker dedica estas historias a pasar en limpio lo que venimos leyendo desde que arrancó. Primero con un texto (maravillosamente ilustrado por Marcos Martín) que resume toda la historia del Capi. Después, con un numerazo centrado en Sharon Carter y otro unitario notable, protagonizado por Bucky Barnes (estos dos dibujados por el brasileño Luke Ross). Después viene el extra-large n°600, que gira en torno al primer aniversario de la muerte de Steve Rogers y nos muestra cómo lo viven distintos personajes. Acá a Brubaker lo acompañan bestias como el legendario Howard Chaykin o los ascendentes David Aja y Rafael Albuquerque, y además hay secuencias escritas por otros dos grossos, los ya veteranos Stern y Waid, ambos con buenos dibujantes. Y de ahí nos vamos a Reborn, cuyo TPB espero ansioso.
Pero antes de que termine este tomo, tenemos otro número doble, el 601, en el que se publica aquel Annual que iba a salir en 2006 y no salió, ese en el que Brubaker formaba equipo con el maestro de los maestros, el inmortal Gene Colan. Colan, quien dibujara bocha de números gloriosos a fines de los ´60, se reencontró con el Capi (y Bucky) en un flashback a la Segunda Guerra Mundial lleno de pesadillescos vampiros y truculentas decapitaciones, en una historieta MUY heavy y MUY jodida. Colan tiene hoy 83 años, así que no le pidas que suba a cabecear todos los centros… Es más, ni siquiera le pidas que entinte. Acá vemos su dibujo a lápiz, muy bien coloreado, y si bien no está tan afilado como en sus años mozos, se lo sigue disfrutando por su solidez y su excelente despliegue narrativo.
Si realmente lo que viene después es una bosta inmunda e irrespetuosa, este será el último tomo del Capi que calce en mi biblioteca. De ser así, no tengo dudas de que será un broche de oro, un canto del cisne, una despedida lujosa y a todo culo, con Cerati descorchando champán frente a una multitud al grito de “Gracias… totales!”.

7 comentarios:

Preva dijo...

Andres ( o debo decir campéon?), una consulta así tipo paracaidista : ¿a Steve Rogers ya lo revivieron?.

Andres Accorsi dijo...

Supongo que sí, pero eso sucede en Reborn, que es el próximo tomo del Capi que tendría que salir.

WALT dijo...

Y a Steve Rogers ,le abrieron el nicho y le cortaron las manos como a Perón ?

W-

Cuestionador dijo...

¡gracias por la reseña, Andrés! La etapa de Gruenwald es chota, pero tiene algun que otro personaje interesante, como Madcap...

Patricio dijo...

Este post va dedicado a pregutarte por lo que dices de Ironman, cuando se venía Civil War, uno pensaría que el Capitán America iba a ser el obsecuente el sirviente del gobierno, como lo había hecho en tantas ocasiones. Stark desafío al gobierno de USA varias veces , Armor Wars, La primera Alcohol Saga donde desbarata un complot de Shield para evitar una toma hostil de sus empresas, en resumen un tipo con su propio sentido de la justicia y cuando esto se contrapone a lo que piensa el gobierno, al diablo con él. Lo que hicieron con Iron Man en civil War y posteriormente no guarda relación con su personalidad, más allá de que la historia fuera decente o no, es incoherente.

Andres Accorsi dijo...

Más o menos... Iron Man siempre fue tirando a republicano, y el Capi tirando a demócrata.
Encima previo a Civil War tenés la saga en la que Tony Stark asume como ministro de Defensa, como para que quede claro que se encolumna firmemente detrás de la política de Bush.
El Capi luchó toda su vida por defender la libertad y los derechos cívicos de los americanos, y la ley de Bush que obliga a los superhéroes a registrarse y revelar sus identidades va EN CONTRA de los ideales del Capi. O sea que no es ilógico que haya elegido enfrentarse al gobierno, como ya lo había hecho a mediados de los ´80, cuando se pelea con Reagan y deja de ser Captain America para convertirse (brevemente) en The Captain.

Patricio dijo...

Concuerdo contigo a medias, Andres, las Historias de Michelinie o O Neil no perfilaban un Ironman Republicano, en todo caso un tipo por encima de los intereses del gobierno, independiente. Esta faceta hasta se ve en las pelçiculas de ironman. Otra cosa es que prepararan el terreno para Civil War con Historias previas, pero no va de la mano con lo escrito del 1977 al 2000 mas o menos.
Del Capi a mediados de los 80 claro no repudio al gobierno, pero renunció, no lo enfrentó directamente. Piensa si Steve Rogers hubiera hecho una conferencia de prensa diciendo lo que el gobierno pretendía imponerle, con eso toda la saga de Grunewald se iba al diablo. Por último, el Capitan America como combatiente anti Hitler, simbolo de Usa no me parece muy democrata, un buen soldado y cumple sus ordenes (generalmente).