el blog de reseñas de Andrés Accorsi

sábado, 22 de octubre de 2011

22/ 10: REX MUNDI Vol.6


No me aguanté más la intriga y me devoré el último tomo de esta serie que empecé a leer el año pasado y de la cual reseñé todos los tomos anteriores.
Acá pasa de todo, todos los enigmas se resuelven excepto uno: quién es el padre del bebé que Genevieve lleva en su vientre. Tampoco importa demasiado. Todos los demás misterios que Arvid Nelson arrastró con mano maestra a lo largo de seis libros (en total, Rex Mundi le consumió diez años de su vida) se explican de modo claro y convincente. La misteriosa figura encapuchada que seguía (y a veces ayudaba) a Julien Sauniére es la primera revelación grossa y no, no es quien yo sospechaba. Todo el tema de la sangre del Duque de Lorraine, el linaje del Rey David y el mismísimo Jesucristo, también tiene una explicación impactante. Los poderes mágicos zarpados de Isabelle, el aguante del propio Sauniére (a quien vimos recibir golpizas y sesiones de torturas que serían la envidia de cualquier masoquista), varios momentos en los que el protagonista pelaba algún talento mágico, todo el chamuyo de las frutas azules del bosque de Cataluña… Todo cierra perfecto.
Este tomo es, obviamente, el más virado a la acción, porque acá se hace inevitable el encuentro cara a cara entre héroe y villano. Y hay cositas de las que yo no quería ver, como un intercambio de conjuros entre dos hechiceros mega-power que parecen tirarse kame-hame-has. Por suerte esto no es lo que define el conflicto final. Está porque tiene que estar, pero antes de llegar al climax de la saga. También la acumulación de muertes, una más jodida y shockeante que la otra, hace que Nelson tenga que recurrir al viejo truco de la resurrección, que es lícito, porque acá hay magia y misterios religiosos. Si el tomo terminara a la mitad, sería una carnicería, un canto a la maldad más cruel. Y bueno, hay que revertir la cosa para el lado de la justicia y al guionista se le ocurre una forma no fácil ni divertida para los “héroes” (porque ellos también se tienen que ensuciar y masacrar a decenas de esbirros de Lorraine), pero efectiva y coherente con el desarrollo de la trama. De todos modos, la derrota de Lorraine sale carísima.
Por momentos, este tomo puede resultar perturbador. A todas esas muertes escabrosas le tenemos que sumar decapitaciones, torturas, gente empalada o atravesada por lanzas o espadas, tipos que abusan de nenas de 14 años y esqueletos reanimados que combaten a dentelladas y le arrancan cachos de cráneo a sus víctimas. Y paredes y gárgolas que se desploman y aplastan gente, ya que estamos. Un verdadero holocausto, un baño de sangre absolutamente terrible, encima dibujado de modo sumamente realista, sin escatimar ni esconder nada.
El grueso del tomo está a cargo, como no podía ser de otra manera, del maestro cordobés Juan Ferreyra, que una vez más hace magia tanto desde el dibujo como desde el color y sale de esta ordalía posicionado como uno de los grandes dibujantes que tiene hoy el estilo académico-realista. Nunca las mencionamos pero son muy notables las ilustraciones de Ferreyra que aparecieron como portadas cuando Rex Mundi se editó en comic-books. Acá el ídolo pela un estilo totalmente distinto, pensado para ser pintado en colores planos, con una técnica totalmente distinta, en la que la línea negra tiene mucho más peso, y con la que logra composiciones de increíble fuerza dramática. Supongo que complementará el dibujo a tinta con alguna técnica digital, porque pelar esos cross-hatchings a mano es algo demasiado demencial incluso para Ferreyra.
El libro abre con una historia menor, apenas conectada con la saga central, que tiene el atractivo de estar dibujada por otro induscutido, Guy Davis. Y cierra con una aventura también inconexa, dibujada con lo justo por Brian Churilla (habitué de las antologías de Image) pero con un muy buen guión de Nelson. Y también hay pin-ups y boludeces de relleno, como para completar un tomo devastador, bastante más voluminoso que los anteriores.
Y no hay más. Se terminó la historia del forense que enfrentó al poder para descubrir el misterio del asesinato de su amigo y terminó por encontrar el Santo Grial. Baja el telón de este mundo alternativo, al que recorrimos guiados por la aventura hasta familiarizarnos por completo con su entramado histórico, político, religioso y hasta mágico. Fue un viaje intenso, adictivo y sobre todo, inolvidable. Muuuy grosso.

1 comentario:

Juan Ferreyra dijo...

Buenisiiima la resenia de nuevo Andres! Me alegra mucho que te haya gustado la serie!
Las tapas de los comics mensuales en el utimo tomo siguiendo una misma linea y con los presonajes principales de las series fue idea mia, y siempre tuve ganas de usar esa tecnica de la madera entintada y raspar linea a linea, pero nunca consegui comprarla, para estas tapas use exclusivaente la Wacom Cintiq.
Estuve Con Arvid hace unos dias en su casa y me paso los dos guiones que hay hasta ahora de la Peli de Rex, uno es una cagada increible! (basada en tiempos actuales con motos que vuelan, puaj!) y el segundo guion un poco mejore, es interesante ver como hacen bosta las series para adaptarlas a hollywood! :)