el blog de reseñas de Andrés Accorsi

jueves, 2 de octubre de 2014

02/ 10: Y YO, ¿POR QUE NO TENGO BANANA?

Otro libro de Copi editado en Argentina y otra oportunidad inmejorable para descubrir (mal y tarde) la obra de este genio vanguardista de la historieta y el humor.
Creo que de los tres libros que reseñé en el blog (es decir, de los tres libros editados por El Cuenco de Plata) este es el que más gracia me causó. Me reí mucho, a carcajadas. Me da la sensación de que este es el libro que tiene las historietas más zarpadas, más idas al carajo. Desde la cátedra de humor negro llamada “La Elección de Miss Ciega”, hasta chistes de gays, lesbianas, travestis, abortos, drogas duras, anos contranatura, anticonceptivos, alcoholismo, crímenes shockeantes, zoofilia y perversiones sexuales varias. Y lo más lindo, lo que más me cierra de todo esto es que Copi no arma la típica estructura del sketch que avanza hacia un remate, sino que estos chistes (algunos muy fuertes, muy impactantes) aparecen como una cosa casi normal, natural, en medio de estos diálogos filosos y siempre al borde del disparate que protagonizan estos personajes.
La palabra “sketch” me parece doblemente precisa para hablar de Copi. Primero porque (como ya señalamos en otras reseñas) las historietas del ídolo parecen puestas teatrales, en las que los personajes apenas se mueven, la cámara está siempre quieta y todo el elenco se ve siempre de cuerpo entero. Pero al ser breves, más que una obra de teatro parecen un sketch. Y además “sketch” en inglés significa “boceto”, y eso define bastante bien la impronta gráfica de Copi.
Acá parece no haber un boceto previo a lo que sale publicado. Lo que vemos es el boceto, realizado a mano alzada, pero con tinta en vez de lápiz. Copi dibuja lo mínimo indispensable. No hay fondos, las viñetas no están enmarcadas, los objetos que aparecen están apenas delineados, hasta las expresiones faciales (importantes en la comedia) aparecen sólo cuando no queda más remedio. Esto es muy raro, pero en realidad lo más raro es que funcione. Que uno, como lector, firme ese pacto en el que acepta que ese garabato es una mujer, que esa línea es una silla, que esa pilita de ladrillos asimétricos es una pared, etc. De alguna manera, Copi se sale con la suya y logra que percibamos a ese universo minimalista, incompleto y deforme como un universo válido, en el que habitan no garabatos hechos a los santos pedos, sino humanos, personajes tan reales y tan complejos como cualquiera de nosotros.
27 años después de su muerte, Copi sigue enseñando. Su timing para la comedia todavía no se pudo igualar, y andá a saber si alguna vez se supera. Su capacidad para llevarte mediante los diálogos por situaciones que van del absurdo a la grosería más extrema (pasando por temas “profundos” como la madurez, el psicoanálisis, la brecha generacional, el feminismo, la educación “progresista”, etc.) resulta impactante aún hoy. Y lo único que hace un poco de ruido son algunas frases en las que se mezcla el castellano porteño con el neutro. Por ahí el mismo personaje en una viñeta manda “He soñado que matabas a mamá” y en la siguiente manda un “¡Joya!”. Aparentemente las historietas están traducidas de una edición francesa, pero hay algunas dudas, algunos titubeos acerca de a qué castellano traducirlas. Pero bueno, no es algo taaan grave. Y si alguna vez viste una historieta de Copi en alguna revista de los ´60 o ´70, te va a sorprender cómo el rotulista Fabián Barreira imita a la perfección la caligrafía del maestro.
Ojalá se editen más libros de Copi en Argentina, así más gente (de distintos palos, porque el autor también es muy conocido en el ámbito del teatro y la literatura) descubre y disfruta sus historietas, muy alienígenas y muy próximas a la vez.

6 comentarios:

Luq dijo...

Lástima que estas ediciones salen carísimas y uno se las devora en 10 minutos

Rodrigo Lopez dijo...

Y que no se pueden comprar en otros paises....que grosso era Copi.

Anónimo dijo...

Mientras no sea al castellano cabeza y grasa con el que arruinabas los comics que editaba Perfil, todo bien.... para los libros de Clarin que castellano usabas gordito?

Anónimo dijo...

Pero si vas a poner lo de Breyfogle citalo, sino no lo va a leer nadie (aunque supongo que ya se sabe igual).

No soy k pero el evento estaba bueno, esta es la única "mancha" hasta ahora, pero con el país que tenemos era de esperarse que en algún momento sucediera algo así.

Yo me quedo con estas frases, creo que fue más que justo, yo me hubiera puesto mucho peor para ser sincero, es un robo la verdad.

"¿Por qué nadie me advierte que los pesos argentinos no tienen ningún valor en los Estados Unidos? En la casa de cambio no me advirtieron. La gente que dirige Comicópolis no me advirtió. Habría bastado una frase".

"Traté de cambiar (los billetes) en Argentina antes de dejar del país. Ellos se negaron".

"No tuve problemas en Argentina. Me culpo a mí y a mi propio Gobierno por mi ignorancia".

"Ninguna casa de cambio, banco o cooperativa de crédito intercambiarán pesos por dólares. Mi propio banco hizo una búsqueda minuciosa para estar seguro. Me dijo que ha estado sucediendo desde hace dos años", escribió. "¿Por qué no me advirtieron en mi propio país cuando intercambié dólares por pesos? ¿Por qué no me advirtieron que no podía cambiarlos a dólares? Se siente como un robo legal perpetrado por los Estados Unidos en connivencia con Argentina".

Anónimo dijo...

También incluye una crítica al capitalismo: "Economía en beneficio de la élite del poder / Deudas que se imponen intencionadamente a países enteros a través de maniobras económicas y psicológicas complejas, que pueden parecen ser (y son a veces) legítimas, pero a menudo no lo son / Comportamiento esperado de cualquier clase dominante. Comportamiento esperado de los sociópatas".

Por lo menos dice que todos e Argentina lo trataron bien, se habrá ido con los bolsillos vacíos pero no fue la gran Meredith Brooks jaja, esa mina no vuelve más ni a mirar el en un mapa pobre, me dolío a mi ver las cosas que le tiraban, y no se lo merecía.

Anónimo dijo...

Hasta países como Perú o Colombia se cagan de risa de la economía Argentina actual y no se los puede culpar. Esto ya no es un país, es un chiste y uno muy malo.