el blog de reseñas de Andrés Accorsi

miércoles, 16 de julio de 2025

SMURFS

Bueno, ahora sí. Fui a ver la nueva peli de los Pitufos, una mega-producción animada, hecha con guita de empresas de varios países, y por supuesto basada en las historietas creadas por el glorioso belga Pierre Culliford, más conocido como Peyo. Nunca había visto un largometraje de los Pitufos, y tengo entendido que los que hay son bastante chotos. Por eso fui al cine con bastante miedo. Sin embargo, me tranquilizó ver que en el afiche no aparecían actores de carne y hueso, solo personajes animados, y que el director de este film es Chris Miller, el mismo de Shrek III y Puss in Boots. Después empecé a reconocer las voces de los actores que participan: Rihanna, John Goodman, Kurt Russell, Xolo Maridueña, Sandra Oh... y por supuesto pensé "Qué zarpado, y qué delirio que en la mayoría de las funciones esto se proyecte en la versión doblada, donde en vez de estas bestias están las voces de... Juan Carlos Nadie". Te imaginarás que si el rol principal es para Rihanna, la película tendrá canciones. Y sí, tiene canciones, pero poquitas. No es exactamente un musical. La película me atrapó y por momentos me fascinó por su faceta visual. El diseño de los personajes está perfecto (como en la serie de Astérix: El Combate de los Jefes, combina los yeites de la animación moderna con el trazo clásico de las historietas de Peyo), los escenarios son magníficos, la acción es tremenda, hay un exceso de imaginación, estallidos de creatividad sin límites a la hora de plasmar (con técnicas tan variadas como asombrosas) esta aventura de magia, fantasía y (por momentos) delirio. Es un eye-candy perfecto. Te sentás, mirás esa pantalla, y la peli te transporta, te hace vivir mundos y sensaciones que no están en los comics de los Schtroumpfs, pero a quién carajo le importa si está todo tan bien dibujado, con esos colores y esos chiches visuales tan lindos. Son 93 minutos de un vuelo casi lisérgico, falopa de la buena, que hará que, incluso si los personajes y el argumento te parecen una pelotudez atómica, la pases bien. El argumento (escrito por Pam Brady) es muy raro. Simplista al mango para los adultos, y MUY fumado para los chicos. Por ahí para la generación post-Adventure Time y post-Steven Universe, los conceptos que tira esta peli no son taaan extremos. Pero no tengo dudas de que hace 10 años nadie te aprobaba un guion de peli para chicos con múltiples dimensiones paralelas, portales místicos, varias razas de bichos fantásticos, largos flashbacks y un lore complejo y ambicioso como el que vemos acá. Tal vez lo más loco sea lo de la ampliación del lore de los Pitufos. Brady se habrá dado cuenta de que la única forma de que esto no fuera un capítulo más de una serie, sino un hito en la historia de los personajes, era subiendo mucho el nivel de ambición, el alcance de la aventura en cuestión. Y así introduce un montón de elementos fantásticos que no vienen de la obra de Peyo, que le dan a la película un contexto mucho más épico, más grandilocuente, al punto (a mi juicio, ido a la mierda) de que para el final tenemos a un pitufo con las habilidades mágicas del mejor Doctor Strange, enchulado con el power cosmic del Silver Surfer. Una fumariola tan extrema que, si mañana se hace una secuela y no la escribe Pam Brady, va a quedar rápidamente en el olvido. Los personajes son carismáticos, y acá muestran un costado más bravío, menos tierno, porque los riesgos que corren así lo exigen. Hay varios chistes muy graciosos, pero (a diferencia de las pelis de Shrek, por ejemplo) no están esos guiños para los adultos que los pibitos difícilmente pesquen. También hay un subtexto interesante que tiene que ver con la búsqueda de la identidad, de eso que nos hace diferentes a los demás y nos permite destacarnos, aunque sea por los motivos incorrectos (como ser vanidoso, gruñón, torpe o dormir todo el día). Y un mensaje muy positivo para los chiquitos, que es "por más distintos que seamos, juntos podemos lograrlo". Atenti, dije "mensaje" y no "moraleja". Esta no es una historia con moraleja, que te baja línea y te enseña a vivir. Es un mega-bolonki aventurero, con un ritmo frenético, alguna que otra pausa más lírica, y un desfile incesante de peripecias en las que uno que es grande, sabe que los Pitufos no se van a morir, pero los chiquitos van a sentir en carne propia la tensión. Como fan de los comics de Peyo, me fui perplejo por todo lo que esta película le agrega a la mitología de la serie que desde 1958 triunfa en el mercado franco-belga. Entre los productores figura la hija de Peyo, de lo cual deduzco que todo esto tiene la aprobación de los herederos del ídolo. Y obviamente me pregunto si en próximas entregas de la historieta van a incorporar algunos de los conceptos y personajes que introduce la peli, o si van a quedar en la anécdota cuasi-bizarra, una iteración totalmente fuera de la continuidad canónica, como pasa con las versiones fílmicas de los comics de superhéroes. La función arranca con un cortito de SpongeBob Squarepants (conocido en Latinoamérica como Bob Esponja), de unos tres minutos, que no tiene diálogos y es un meo de la risa. Si vas al cine, llegá temprano, así no te lo perdés.

2 comentarios:

PEL-PER dijo...

"Los Pitufos y la flauta mágica" (1975) es la mejor de todas las películas animadas hechas hasta hoy sobre The Smufs.

Andrés Accorsi dijo...

Me aburrió un toque. Esta tiene mucho más ritmo.