Salí del microcine donde
vi este largometraje bastante contento. Yo nunca fui muy fan de los comics de
Shazam! (o Capitán Marvel, si prefieren) y me pareció que el director David
Sandberg y sus guionistas habían creado una versión del mito MUY traidora a la
versión comiquera, pero que funcionaba bien a varios niveles. Después,
charlando con gente más fanática del personaje, descubrí que casi todos los
hallazgos de la película (por no decir todos) están tomados de las historietas
de Geoff Johns y Gary Frank, que yo nunca había leído. Hoy antes de escribir
esta reseña me leí todo lo que encontré de Shazam! escrito por mi clon perdido,
y sí, me gustó mucho más que la película. Ya con que haya dibujos de Gary Frank
la diferencia con cualquier imagen filmada es abismal.
Pero los 132 minutos del
largometraje se me hicieron muy llevaderos, me divertí mucho. Me encontré un
combo efectivo, bien filmado, con buen equilibrio entre machaca, humor y
emoción, y encima todo lo que me parecía obscenamente irrespetuoso respecto del
Shazam! de mi infancia, resultó estar tomado casi de modo textual de un comic
que me gustó mucho. Se me hizo un poco larga la batalla final contra los
villanos y el resto me atrapó con un buen ritmo, diálogos muy logrados y un twist
ingenioso a situaciones que ya vimos chotocientas mil veces tanto en cine como
en historietas.
El argumento, las
sorpresas que ofrece la película a nivel argumental, son tan tributarios de los
comics de 2012-13 que me siento habilitadísimo a dar detalles sin sentir que
estoy spoileando. Cualquiera que haya leído el Shazam! de Johns y Frank YA SABE
prácticamente todo lo que va a pasar. Básicamente la película deja afuera a
Black Adam (supongo que para tener un villano pulenta en una hipotética secuela),
elimina las menciones a Tawny y le da bastante bola (y un espesor dramático muy
atractivo) a la mamá biológica de Billy Batson. Fuera de eso, sigue al pie de
la letra los lineamientos del comic, hasta el detalle de no ambientar la
historia en Fawcett City sino en Philadelphia. Por supuesto, que la trama se
nutra de los mismos conflictos no significa que se resuelvan de la misma
manera, ni en el mismo orden. Pero hay tantas similitudes, tantos pequeños
detalles del comic que el film de Sandberg se lleva tal cual a la pantalla que
casi podemos hablar más de una adaptación que de una versión.
En cuanto a las
actuaciones, medalla de oro para Jack Dylan Grazer (un Freddy Freeman
copadísimo y entrañable desde el primer fotograma hasta el último), medalla de
plata para Asher Angel (un Billy Batson sumamente convincente) y medalla de
bronce para Zachary Levi, quien fuera Fandral en las películas de Thor y acá
logra componer un Capitán Marvel que combina ingenuidad, picardía, nobleza,
estridencia, canchereada y sorpresa ante las proezas que él mismo va logrando.
Los efectos especiales y la música, muy bien. El diseño de producción… bien,
pero yo esperaba un poco más de la Rock of Eternity. De todos modos está todo
bastante bien alineado con la visión de Johns y Frank, que aparentemente
Sandberg y su equipo respetaron como si fuera la Biblia (y como si nunca
hubiesen existido otras versiones de Shazam!).
Como siempre digo,
cualquier película de Hollywood sin trama romántica suma automáticamente dos
puntos extra, y en todo caso esta vez esa ausencia se compensa con un mensaje
de “valores familiares” y “lo primero es la familia” que no llega a hacerse
empalagoso, pero casi. En el comic, donde las últimas escenas coinciden con el
festejo de la Navidad, resulta bastante peor. En la peli alguien tuvo la viveza
de explotar a full el clima pre-Navidad sin caer en la obviedad de cerrar la
historia con un brindis.
En síntesis, película muy
competente, entretenida, dinámica, con pocas sorpresas para el que leyó el
Shazam! de Johns y Frank, con (hasta ahora) cero integración a un supuesto “DC
Cinematic Universe”, pensada (al igual que la historieta en la que se basa)
para interesarle incluso al que jamás se cebó con las aventuras que acumuló
Billy Batson en casi 80 años. La secuencia de los créditos finales es
magnífica, la escenita extra que le sigue está muy bien (acá aparece mi villano
de Shazam! favorito) y la que cierra la peli (después de la infinita sucesión
de letritas microscópicas) es un chiste gracioso, no mucho más.
Ahora sí, a esperar
Avengers: Endgame con la expectativa que semejante hito se merece. Nos
reencontramos pronto con nuevas reseñas, acá en el blog.
3 comentarios:
Me alegra que DC la siga pegando ja...
Hellboy Llega antes que Endgame...
Aunque si uno se guia por el escarnio general que los trailers aparejaron, tal vez sea mejor salteartela.
Sí, no descarto ver la de Hellboy, pero claramente NO es la película que estoy esperando.
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