sábado, 5 de diciembre de 2020
GRENDEL TALES: HOMECOMING
Me cayó milagrosamente este tomito, que recopila una miniserie de Grendel Tales de apenas tres episodios. Una historia muy corta, que se lee muy rápido, pero no exenta de sorpresas.
Básicamente, me sorprendieron dos cosas: 1) Nunca pensé que este arquito tan menor estuviera tan enganchado con Grendel: War Child. Sin embargo, todo pasa alrededor de Susan Veraghen, un personaje que en dicha saga empieza con un rol muy menor y crece a lo largo de toda la obra hasta convertirse en un personaje secundario de bastante relieve. A cada página de Homecoming me resultaba más lógico que Matt Wagner y Pat McEown hubiesen querido traer de vuelta a Susan y profundizar en su historia, sus motivaciones y sobre todo su potencial como heroína grossa en este universo intrincado y genial como es el de Grendel.
2) Me costó, realmente, hacerme a la idea de que este dibujante era el mismo que el de War Child. Son historietas separadas por tres o cuatro años, pero en ese breve lapso lo que evoluciona el dibujo de McEown es infernal. Y va a seguir evolucionando. Para fines de los ´90, McEown va a ser un dibujante bien enrolado en el indie yanki, mucho más cerca de las antologías más vanguardistas de Fantagraphics y Drawn & Quarterly que de un comic de acción y aventuras como es Grendel. En esta estación intermedia que es Homecoming, McEown se suelta muchísimo respecto de su labor en War Child, donde hace un trabajo magnífico, pero muy pendiente de parecerse a los dibujantes típicos del mainstream. Parecía un paso previo hacia dibujar… Punisher, no hacia esta mutación gráfica que tanto disfruté en Homecoming.
Mucho tiene que ver con el hecho de que, en este arco de Grendel Tales, McEown sólo está a cargo de los lápices. Quien completa la faz gráfica con tinta y color es el glorioso Dave Cooper, el zarpadísimo autor de Pip & Norton, Suckle, Crumple y tantas otras maravillas surgidas del indie más lisérgico. El trazo finito, prolijo y de grosor uniforme que emplea Cooper convierte a McEown en un dibujante de línea clara, con bastantes puntos en común con Arno, aquel talentoso dibujante francés (que también vivió en Chile y en Uruguay) que tuvo la desgracia de morirse a los 35 años. Y a la hora de agregarle el color, Cooper busca por el lado de Moebius y encuentra esa historieta hipnótica, Le Planéte Encore, con la que en 1990 el Genio Infinito sorprendió a propios y extraños. Esa misma paleta y esas mismas texturas (que parecen logradas con lápices de colores aplicados de manera muy sutil y muy precisa) aparecen en un comic de acción y machaca, de la mano de un Cooper inspiradísimo, y hacen que Homecoming no se parezca en nada a ninguna otra historieta publicada en EEUU en aquellos convulsionados mediados de los ´90.
Y bueno, por el costado de todo este despliegue fastuoso de experimentación y belleza, avanza una trama también imaginada por McEown, y complementada por Matt Wagner, quien aporta “diálogos adicionales”. Es una trama chiquita que a duras penas se sostiene las 60 páginas que dura la obra, con poquitas pretensiones. Está buena para lo que decía yo antes: continuar la evolución de Susan de personaje de relleno a personaje con peso propio dentro de la mitología de Grendel. Pero la aventura en sí, despojada de su conexión con la saga creada por Wagner, es muy menor y está muy vista. Chica dura y aguerrida vuelve a su pueblo después de mucho tiempo y lo encuentra sojuzgado por una banda criminal, cuyo líder aterroriza a la población. Se reencuentra con Avrill, la chica a la que amó en secreto en su juventud, ese romance se reactiva y florece, los malos le ponen un fin abrupto al matar a Avril, y la chica dura y aguerrida descarga una venganza brutal que termina con el capo de los malvados derrotado y muerto. Fin. En 48 páginas se podía contar lo mismo, pero 60 se hacen muy llevaderas, porque las personalidades de las dos chicas están bien trabajadas, la trama romántica está bien llevada y los estallidos de machaca son realmente impactantes.
¿Recomiendo Grendel Tales: Homecoming? Sí, pero con reservas. Si no sabés quién es Susan Veraghen y nunca leíste Grendel: War Child, probablemente esto te parezca la nada misma. A menos que seas muy fan de Pat McEown o de Dave Cooper y ahí sí, esto tiene altas chances de resultarte irresistible más allá de que no te interese en lo más mínimo la trama y el universo en el que se desarrolla. Si ya venís manija con el universo de Grendel y estás buscando arcos de Grendel Tales que no sean sólo humo sino que conecten grosso con los arcos principales, acá tenés uno que aporta bastante, incluso con Matt Wagner participando muy poco.
Nada más por hoy. Me dieron ganas de releer War Child, pero me las voy a aguantar, así en unos días les traigo otra reseña, de otra cosa. Gracias y hasta pronto.
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1 comentario:
El personaje de Susan Veraghen está tomado por Greg Rucka para su novela Past Prime, novela ilustrada por Wagner, donde Susan es la verdadera protagonista y se transforma en un personaje tan trascendente como Orion Assante o Argent, el viejo antagonista de los primeros Grendels. También me hizo recordar a Arno el trazo de McEown posterior a War Child, tremendo.
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