el blog de reseñas de Andrés Accorsi

jueves, 25 de mayo de 2023

FERIADÍSIMO

No tengo la menor idea de por qué me desperté a las 7:45 de la mañana, pero bueno... acá estamos... Veremos cómo me trata este horario ímprobo a la hora de escribir reseñas. Arranco con el Vol.2 de Innocent (el Vol.1 lo vimos el 19/01/23), el manga ambientado en Francia a fines del Siglo XVIII y firmado por Shin´ichi Sakamoto. Tenía miedo de que, una vez superado el impacto que me provocó el dibujo en el primer tomo, el segundo me interesara menos. Por suerte no fue así: la temática es tan atrapante, la época histórica está tan bien reflejada, el "countdown" hacia la revolución de 1789 está tan bien sugerido, que al final con este tomo me enganché más que con el primero. Creo que lo único que no me cierra es que los personajes son un poco extremos, casi al filo de la caricatura. Charles-Henri es demasiado sensible, su madre es demasiado desalmada, la hermanita también va para el lado del estereotipo... Tal vez eso sea lo único que desentona un poco con la sutileza, la elegancia e incluso la cuota justa de ambigüedad con la que se maneja Sakamoto para contar la historia de los verdugos más temidos de París. Este tomo se mete mucho con el tema de las desigualdades sociales, explora de modo descarnado la miseria, la vulnerabilidad extrema a la que está sometida la inmensa mayoría de la población francesa, en obsceno contraste con el lujo y los privilegios de los que gozan las minorías acomodadas. No hay muchos mangas que se internen en ese pantano, por eso me resulta tan valioso. La trama, centrada en el camino que recorre Charles-Henri para convertirse en el legítimo sucesor de su padre, avanza lento y deja mucho aire para la introspección, y para explicar a fondo un contexto político y social que el lector muy probablemente desconoce. Así es como Innocent se aleja definitivamente del concepto de "aventura" y se parece más a una novela histórica, lo cual también me llama positivamente la atención. Y por supuesto, lo más alucinante es el dibujo. Las cosas que hacen Sakamoto y su legión de asistentes en Innocent no las vas a ver en ningún otro manga. Esto es una cátedra de cómo mostrar la crueldad, la violencia, el horror y la sordidez de la manera más bella imaginable. En cada página hay algo que te hace decir "no, pará, esto es mucho". O una expresión facial, o un efecto de iluminación, o la reproducción de un edificio histórico, o una escena de acción, o una escena de sexo, o primeros planos de órganos de un cuerpo diseccionado. Todo es desmesuradamente hermoso, gracias a un virtuosismo gráfico pocas veces visto en un manga comercial. Ante semejante festín visual, lo que menos me importa es que la historia avance lento. Ni bien consiga el Vol.3, habrá más Innocent acá en el blog.
Me vengo a Argentina, año 2022, cuando se publica en libro Nathaniel Fox y la Tumba de Humayun, de Rodolfo Santullo y Manu Loza. Ese empaste marrón horroroso que se ve en la portada, en la que lo único legible son las letras, por suerte adentro está coloreado como los dioses por El Santa. Hay muchas páginas engamadas en marrones, pero todas se ven mil veces mejor que esa portada piantavotos. El dibujo de Loza es muy bueno todo el tiempo, y alcanza un nivel realmente sublime cuando le toca dibujar primeros planos. Ahí cambia su impronta sintética y dinámica por una donde hay más atención por los detalles, que le queda perfecto. Me encontré con varias páginas que se verían mejor equilibradas si más viñetas tuvieran fondos, pero es un criterio muy personal. Cuando Manu pone fondos, están invariablemente bien trabajados, no los pone así nomás para sacárselos de encima. El guion de Santullo tiene todas las peripecias clásicas de este género "a lo Indiana Jones": diálogos picantes, peligros extremos, escapes imposibles... y dos problemas. Uno es sobre todo un problema mío: yo esperaba un poquito más de ambición, tal vez un subtexto más profundo que "los nazis son muy malos". En el único momento en que se ve un intento por superar esta bajada de línea tan obvia es cuando el guionista nos dice "pero ojo, los ingleses no son los buenos, para ellos el territorio que hoy conocemos como India era una colonia más". El otro problema del guion también tiene que ver con lo malos que son los nazis. Veamos: Herr Kallman, el jefe nazi, contrata a Sabrina, una sicaria, para que mate a un líder indio. La asesina a sueldo cumple con su parte y Kallman, en vez de pagarle y sacársela de encima, la traiciona... y la toma prisionera. ¿Para qué? No tiene sentido. Lo lógico era pagarle y que se fuera de la ciudad, o volarle los sesos de un escopetazo y que se fuera del mundo de los vivos. ¿Cómo vas a dejar viva a una mina que es una asesina profesional y que ni bien pueda va a tratar de vengarse de vos porque la cagaste? ¿Qué sentido tiene eso? La única explicación racional es que Santullo está haciendo un truco de manual: desactivar a un personaje en el primer acto, mantenerlo al margen de la acción en el segundo, y hacerlo reaparecer reloaded en el tercero. Efectivamente, en algún momento Sabrina se libera y va a ser quien altere el equilibrio de poder en favor de Nathaniel y sus aliados. Si la asesina no entrara en acción para cagar a los nazis, el plan de Kallman se cumpliría a la perfección, y el final sería funesto para los protagonistas. Narrativamente, que Sabrina no muera es fundamental para que la historia llegue al final que Santullo quiere darle. Desde la lógica, no tiene sentido que los nazis sean tan malos como para no querer pagarle y no tan malos como para hacerla boleta y que no joda más. Fuera de eso, Nathaniel Fox y la Tumba de Humayun es un comic muy entretenido, con un ritmo ágil, personajes queribles y locaciones asombrosas, a cargo de una dupla que entiende muy bien los códigos del relato aventurero. Si Manu y Rodolfo encaran nuevas entregas de esta serie, acá cuentan con un lector fiel que los va a bancar. Nada más, por hoy. Disfruten el finde largo y lean muchos comics. Gracias y hasta pronto.

2 comentarios:

NN dijo...

Yo tengo los tres tomos iniciales pero sólo leí el primero. La afectación del personaje principal me pareció sobreactuada completamente, y no porque lo que vivencia no sea traumático. Creo que algo falla ahí.
Andrés ¿Estás comprando algo de lo de Shuzo Oshimi que publica Ivrea? "Las Flores del Mal" va muy bien, pero "Blood on the tracks" me está partiendo la cabeza.

Andrés Accorsi dijo...

No, todavía no me animé a engancharme con ninguna de las dos. Pero me las han recomendado mucho, así que puede ser que en algún momento les dé una oportunidad...